17 de octubre de 2020

EJÉRCITO DEL AIRE ESPAÑOL - 47 AÑOS DEL C-130H HÉRCULES EN EL ALA 31

 Por José Luis Lezg   


Toma de un C-130H en zona de operaciones (foto: José Luis Lezg).

 

El primer Lockheed C-130H Hércules se incorporó a su base de Zaragoza el 18 de diciembre de 1973, con denominación T.10 del Ejército del Aire, y se integró en el recién creado 301° Escuadrón. Le siguieron el resto de las máquinas compradas el 3 de enero de 1974, 12 marzo y el 18 de abril de ese mismo año.

 

Inicialmente a su llegada a España, los primeros aparatos fueron asignados al 301° Escuadrón, que fue creado a tal efecto con personal del Ala 35 de Getafe y del Ala 37 de Villanubla. A partir del año 1978 el 301° Escuadrón pasó a denominarse Ala 31 según la Orden Ministerial 2785/78.

 

Desde su creación, el Ala 31 ha estado ubicada en Zaragoza, ciudad con la que está hermanada y prueba de ello es que en diciembre de 1979 en un acto solemne el Ala 31 recibe su estandarte donado por la ciudad.


Parche de hombro A400M. 

Emblema del 312° Escuadrón del Ala 31.

 


Emblema del 311° Escuadrón del Ala 31. 

Parche de hombro C-130H Hércules.

Emblema del Ala 31. 

Parche de hombro de los Hércules del Ejército del Aire.

 

La unidad está constituida por dos Grupos, el Grupo de Material es el encargado de realizar las revisiones y reparaciones y tener preparados los aviones para volar, y el Grupo de Fuerzas Aéreas que es el encargado de volar las misiones y está formado por el 311° Escuadrón de Transporte y el 312° Escuadrón de Reabastecimiento en vuelo.

 

Algo más tarde, en 1989, una reorganización administrativa transformó la denominación de Ala 31, en Grupo 31. Este cambio se deshizo para el verano de 1999. Desde ese momento y hasta la actualidad, todos los Hércules del EdA se hallan encuadrados en el Ala 31 con base en Zaragoza. A su vez, del Ala 31 dependen dos escuadrones, el 311° y el 312°, a los cuales están asignados los aviones según sean C-130H / C-130H-30, o KC-130H respectivamente.

 

C-130H Hércules en la plataforma del Ala 31 (foto: José Luis Lezg).

 

En enero de 1976 llegaron a Zaragoza las tres nuevas unidades adquiridas, en este caso de la versión cisterna KC-130H, con la denominación TK.10 para el Ejército del Aire (EdA).

 

A finales de 1979, una nueva tanda de dos aeronaves llegó a Zaragoza, y en enero de 1980 una tercera máquina, todas ellas de la versión H. Ya a fines de ese año, se incorporaron en noviembre y diciembre respectivamente, dos nuevos KC-130H.

 

El lamentable accidente del T.10-01 en las Islas Canarias en el cual se perdió el aparato, y lo más trágico, toda su tripulación, dejó a la unidad con un avión de menos. Es por ello que para completar la flota el 7 de marzo de 1988 se incorporó el C-130H-30 TL.10-01, que es una versión 4,73 m más larga que la estándar. La capacidad de trasporte de este aparato es la misma que la que corresponde a la versión normal, pero al ser más larga puede llevar elementos más voluminosos.

 

Pasada a baja cota de un C-130H para lanzamiento de cargas (foto: José Luis Lezg).

 

La versión C-130H puede trasportar hasta 6 pallets normalizados (70 m3) o 92 pasajeros. Por su parte, el C-130H-30 tiene capacidad para 8 pallets (94 m3) y capacidad para 120 pasajeros. Ambos tienen capacidades máximas de carga de aproximadamente unas 40000 libras (18000 Kg), con alcance máximo de 910 NM (1700 km). El alcance máximo sin carga es de 2700 NM (5000 km) y el peso máximo al despegue es de 79000 Kg. A su vez, la envolvente de vuelo es algo mejor que la versión “corta”, con lo cual la aeronave consume algo menos de combustible y puede volar unos pocos nudos más rápido.

 

Este avión ha sido la columna vertebral del Mando de Transporte gracias a su gran capacidad para despegues y tomas de tierra en cortos espacios de terreno sin preparar, portando gran cantidad de personal y material militar. Su actuación no sólo se limita a servir de apoyo a los despliegues de las unidades aéreas y cooperación con la Armada y el Ejército de Tierra, sino que participa en numerosas misiones humanitarias. Hace algunos años finalizó un programa de modernización que permitió prolongar su vida operativa, y que ha supuesto la renovación de los equipos de aviónica, comunicaciones, autoprotección, combustible y cisterna de reabastecimiento, piloto automático digital y GPS.

 

Prueba de motores previa al despegue (foto: José Luis Lezg).

 

Este avión lleva ya más de tres décadas de servicio en España. Su historia en territorio español comenzó en junio de 1973, y en diciembre de ese año los Hércules ya surcaban los cielos aragoneses. A partir de ahí, en abril de 1974 se lleva a cabo la primera misión operativa terminándose a finales de el mismo mes. En mayo el EdA realiza la presentación oficial de la unidad y de sus nuevos aviones.

 

En Febrero de 1975, se realiza la primera misión de carácter humanitario en apoyo a la Cruz Roja Española. Malí y Níger son los destinos. Desde entonces, los Hércules siempre han volado allí donde son requeridos, haciendo siempre una gran labor militar y humana. Entre esas misiones se puede destacar la participación de las aeronaves de Ala 31 en 1ª Guerra del Golfo, guerra civil en Etiopía, operación de apoyo al pueblo Kurdo, evacuación del personal español de Zaire, el conflicto étnico en Ruanda, el puente aéreo a Sarajevo, la habitual participación en ejercicios Red/Green Flag desde 1994, la Operación Ícaro, etc.

 

Además, el Ala 31 brinda apoyo constante a los diferentes contingentes de efectivos militares españoles destacados en el exterior en misiones de paz. También las máquinas de los Escuadrones 311 y 312 participan activamente del transporte de ayuda humanitaria a aquellos países afectados por desastres naturales. Dichas tareas son a requerimiento y según surgen en determinado momento.

 

El TK.10-11 / 31-53 comienza a ser preparando para una misión de reabastecimiento a Mirage F1M (foto José Luís Lezg).

 

Sin lugar a dudas el servicio más amargo que han realizado los Hércules del Ala 31, fue el viaje de tres aparatos el 28 de mayo de 2003 para la repatriación de los 62 militares españoles caídos en el trágico y oscuro accidente ocurrido en Trazbón (Turquía), muchos de ellos compañeros del Ala 31 y del Escuadrón de Apoyo al Despliegue Aéreo (EADA).

 

Actualizaciones

 

El principal proceso de modernización de la flota comenzó en noviembre de 1995, siendo el T.10-03 la primera aeronave en recibir las mejoras. Dichos trabajos permitieron homogeneizar la flota y el programa incluyo mejoras en cuatro áreas: estructura, aviónica, comunicaciones y sistemas de auto protección.

 

Dentro del primer apartado, se cambiaron las semialas externas y se blindó la cabina de vuelo y los asientos de los tripulantes, para reforzar la seguridad de los mismos en fases criticas de operación en ambiente hostil.

 

Cockpit del TK.10-11 (31-53) (foto: José Luis Lezg).

 

En cuanto a los sistemas de vuelo y navegación, se llevó a cabo un trabajo integral que incluyó la incorporación del bus digital de datos MIL-STD-1553B que integra todos los sistemas actualizados. Sin duda lo más llamativo en la cabina son las cuatro grandes pantallas suministradas por Allied Signal, aunque menos visibles son los dos ordenadores de misión, o el nuevo radar Bendix RDR-1400. También se incorporaron nuevos instrumentos de navegación como un VOR/ILS de Collins, un TACAN y dos navegadores inerciales con GPS integrado de Litton.

 

Respecto de las comunicaciones, los nuevos equipos incluyeron una radio UHF AN/ARC-164 “Have Quick” de Magnavox. Dos radios HF AN/ARC-127 de Collins y finalmente dos ADF AN/ARN 149 y un transponder IFF AN/ANX-100 siendo los ADF e IFF de Allied Signal.

 

En el apartado de autoprotección de la aeronave, se incorporaron el Radar Warning Receiver (RWR) AN-ALQ-156 de Sanders, que brindan una cobertura de 360º, y los dispensadores de chaff y bengalas AN/ALE-47 de la firma Tracor. Ambos sistemas se hallan integrados, por tanto, pueden funcionar en varios modos, entre ellos, automático o manual.

 

Sistemas de autoprotección AN/ALQ-156 y AN/ALE-47


Antena AN/ALQ-156 y dispensers delanteros que dan cobertura al lado izquierdo de la aeronave (foto F. Puppio). 

       

Dispensers de babor traseros del sistema Tracor AN/ALE-47. Se pueden ubicar hasta cuatro por lado (foto F. Puppio). 

   

Antenas receptoras del sistema de alerta radar Sanders AN/ALQ-156 que cubren todo el hemisferio trasero del avión (foto F. Puppio).

El panel izquierdo corresponde a los controles del sistema. Ubicado en el cockpit, es operado por el navegador (foto J. L. Franco Laguna)  

    

Unidad de emisora/receptora del AN/ALQ-156 ubicados en el lateral de estribor de la cabina de carga (foto F. Puppio).

Dispositivo de disparo manual de bengalas o chaff, en el puesto de observador trasero (foto F. Puppio).

 

El lema del Ala 31 “lo que sea, donde sea y cuando sea” deja bien claro la forma en que se desenvuelven las mujeres y los hombres que la componen. Realizan misiones de toda índole, como pueden ser lanzamiento de paracaidistas, abastecimiento en vuelo, apoyo logístico, operaciones aerotransportadas, aeroevacuaciones, SAR y en las emergencias transporte de ayuda humanitaria.

 

Desde su origen el Ala 31 se ha volcado en la ayuda humanitaria, en ayuda a Cruz Roja, organismos de cooperación internacional, Organización de las Naciones Unidas.

 

En cuanto a estas misiones de apoyo en emergencias cabe destacar las siguientes:

 

  • Terremotos de Yugoslavia en 1979, Argelia 1980, Méjico 1985, El Salvador 1986 y 2001, Irán 1990 y 2003, Turquía 1999, Haití 2010.
  • Naufragio del petrolero Urquiola en La Coruña en 1976.
  • Despliegue en Guinea Ecuatorial 1979-1983.
  • Erupción del volcán Nevado del Ruiz en 1985.
  • Ayuda al pueblo Kurdo en 1991.
  • Huracanes George y Micht en Centroamérica en 1998.
  • Inundaciones en Mozambique en el 2000.
  • Tsunami en Indonesia en 2005.
  • Huracán Katrina en Estados Unidos en 2005.
  • Huracanes Wilma y Beta en Centroamérica en 2005.
  • Incendios en Galicia en 2006.
  • Apoyo logístico para el control de la inmigración ilegal en Canarias en 2006.
  • Inundaciones en Filipinas en 2006.
  • Apoyo a la Unidad Militar de Emergencias en los incendios de Valencia y Canarias en 2007.
  • Destacamento en Nicaragua por el Huracán Félix en 2007.
  • Repatriación del Tesoro de la fragata Nuestra Señora de las Mercedes capturado por la empresa norteamericana Odissey en 2012.
  • Apoyo logístico al control de la inmigración ilegal en Melilla en 2014.
  • Evacuación de enfermos de ébola en septiembre de 2014.

Operando en Ablitas (foto: José Luis Lezg).

 

Participaciones de los C-130H Hércules del Ala 31 en zonas de conflicto bélico:

 

  • Aeroevacuación en la guerra civil de Nicaragua en 1979, un Hércules fue desplegado en San José de Costa Rica para realizar vuelos entre esta ciudad y Managua. En los vuelos de ida se transportaba ayuda humanitaria y en los de vuelta se evacuaba personal
  • Namibia 1989, entre los meses de septiembre y octubre se destacó un Hércules 40 días realizando 16 misiones de apoyo.
  • Operación Tormenta del Desierto -1ª Guerra del Golfo en 1991. Desde agosto de 1990 hasta julio de 1991 el Ala 31 realizó evacuaciones de personal español y extranjero, apoyos al despliegue de unidades de países aliados y el fundamental sostenimiento a los buques de la Armada Española destacados en el Golfo.
  • Repatriación de refugiados Etiopía en 1991, en esta ocasión bajo bandera de Naciones Unidas y en apoyo del Alto Comisionado para los Refugiados, un C-130H del Ala 31 repatrió durante tres semanas a ciudadanos etíopes desde Djibouti a diferentes puntos de Etiopia.
  • Evacuaciones en Zaire en septiembre de 1991, repatriación de ciudadanos españoles tras el golpe de estado desde Kinshasa.
  • Angola 1992, evacuación en coordinación con el Ministerio de Asuntos Exteriores de personal español del aeropuerto de Luanda.
  • Apoyo a operaciones en la antigua Yugoslavia desde 1992, el Ala 31 apoyó a los contingentes españoles en Croacia, Bosnia-Herzegovina, Antigua República Yugoslava de Macedonia y Kosovo, dentro del marco de UNPROFOR, IFOR, SFOR y KAFOR.
  • UNAMIR Ruanda 1995. Dos Hércules estuvieron destacados en Nairobi (Kenia) doce días en apoyo a la Fuerza Aérea Belga en misiones de aeroevacuación.
  • Destacamento ÍCARO en Aviano (Italia). Durante los ocho años que los tankers TK-10 del 312° Escuadrón del Ala 31 estuvieron destacados en Aviano Transfirieron en vuelo 9 millones de litros de combustible a aeronaves de las Fuerzas Armadas Españolas, EEUU, Reino Unido, Francia, Alemania, Canadá e Italia.
  • Operación Libertad Duradera Afganistán 2001. En diciembre de 2001 tres Hércules transportaron ayuda humanitaria de UNICEF desde España a Turkmenistán, para su transporte por tierra a Afganistán.
  • En febrero de 2002 se constituyó el Destacamento Géminis en Manás (Kirguistán), inicialmente se desplegaron tres aviones.
  • Apoyo a la reconstrucción de Iraq 2003-2004. En octubre de 2003 aterrizó en Kuwait el primer avión que formó el destacamento ALTAIR hasta junio de 2004, con misión de apoyo al despliegue español del personal destinado en Iraq.
  • Destacamento MIZAR (Operación de reconstrucción de Afganistan) Desde agosto de 2004 el Ala 31 formó parte del destacamento en apoyo al transporte aéreo táctico, logístico y aeroevacuación médica de la Base de Herat y Equipo de Reconstrucción Provincial de Qala i Naw. Este destacamento inicialmente basado en Manás (Kirguistán) y desde 2009 en Herat albergó la presencia continuada de hasta tres Hércules en zona de operaciones.
  • Operación Unified Protector. De abril a octubre de 2011 un Hércules TK-10 integrado en la agrupación Argos operando desde Cerdeña participó en el establecimiento de una zona de exclusión aérea sobre libia y el embargo de armas en aguas internacionales. El TK-10 transfirió un millón de litros de combustible a los aviones de la coalición.
  • Destacamento MAMBA, desde marzo a octubre de 2014 un T-10 participó en operaciones de mantenimiento de la paz en apoyo a la República Centroafricana.
  • Evacuación de ciudadanos españoles en 2014 desde el aeropuerto de Trípoli.
  • Destacamento MARFIL de apoyo a Malí. De enero a mayo del 2013 y desde octubre de 2014 se han ido alternando Hércules del Ala 31 con C-295M del Ala 35 destacando en Dakar (Senegal) en apoyo a las Fuerzas Armadas Francesas en lucha contra el terrorismo. El objetivo de la misión es el traslado de tropas y material de la Misión Internacional de Apoyo a Malí, realizando la misión de transporte estratégico en apoyo al esfuerzo liderado por Francia y AFISMA (Misión Internacional de Apoyo a Malí con Liderazgo Africano) en cumplimiento de las resoluciones del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas UNSCR 2071 y UNSCR 2085.

Un Hércules del Ala 31 en toma de máximo esfuerzo en pista de tierra (foto José Luis Lezg).

 

Actualmente el Ala 31 realiza también misiones de transporte de personal y material para el sostenimiento de operaciones como la operación “Atalanta en Yibuti”, la operación “Libre Hidalgo” en el Líbano, la de apoyo a Iraq y el despliegue OTAN en Turquía.

 

Los Hércules del Ala 31 también han participado en despliegues como el “Red Flag” en Las Vegas (Nevada, EEUU) o en la “Operación Cruz del Sur” en Overberg (República Sudafricana) para el apoyo en el despliegue y repliegue de las unidades participantes.

 

Los T.10 participan también habitualmente en los cursos EAATTC (European Advanceed Airlift Tactics Training Course) mediante el cual el ETAC (European Air Transport Command) instruye a sus tripulaciones en operaciones tácticas sobre el terreno.

 


Conviviendo por un tiempo el A400M y el C-130H (foto José Luis Lezg).

 

Llega el A400M (T-23)

 

En diciembre de 2016 llegó al Ala 31 el primer A400M de los 27 aparatos contratados y España pasó a ser el sexto país en poner en servicio el A400M. En número de catorce aviones serán recibidos hasta el año 2022, y los trece restantes a partir de 2025 con clara intención de exportarlos a terceros.

 

El A400M puede volar más lejos y más rápido que nuestro veterano Hércules, puede transportar helicópteros y vehículos blindados, hasta 120 soldados con su equipo de combate, con una capacidad de carga de hasta treintaisiete toneladas (la carga máxima del Hércules es de 20 toneladas).

 

También es mucho más eficaz en las misiones de reabastecimiento en vuelo a reactores, debido a su velocidad y altitud de vuelo. Puede además desde bajar a 15 pies para lanzamiento de cargas hasta lanzar tropas paracaidistas desde 40.000 pies

 

 
Un A400M en toma de alta exigencia en el aeródromo de Ablitas (foto José Luis Lezg).

 

Desde la llegada del nuevo aparato el personal del Ala 31 viene realizando actividades relacionadas con la introducción del nuevo modelo en el Ejército del Aire. Esto no solo queda en la formación de personal técnico y tripulaciones, sino también la interactuación con otras unidades como el Escuadrón de Apoyo al Despliegue Aéreo (EADA).

 

Desde 2016 que llegó el primer A400M han estado conviviendo con los C-130H Hércules en el Ala 31, un sistema nobel que ha ido adquiriendo capacidades y otro veterano que va cediéndolas paso a paso hasta la baja definitiva de los Hércules prevista para diciembre de 2020.

 

Para el Ala 31 resulta muy costoso y poco eficiente mantener en activo dos sistemas de armas tan diferentes como son el Hércules y el A400M. Tiene que destinar recursos y personal al nuevo avión que en su gran mayoría provienen de la reconversión de las tripulaciones y personal técnico que hasta ahora operaban al C-130H Hércules.

 

Perspectiva a ras de suelo de la silueta del A400M (foto José Luis Lezg).

 

El A400M supone dotar al Ejército del Aire de una capaz, creíble y autónoma fuerza de despliegue estratégico. Nunca ha sido más real el lema del Ala 31: 

“Lo que sea, donde sea y cuando sea”

 

Fuente: https://www.gacetaeronautica.com