1 de febrero de 2023

AVIACIÓN TORPEDERA ITALIANA: EL 132º GRUPO

 

O zona hundimiento / / ruta y lugar de separación de la escolta
 

Aunque curiosamente los inicios del ataque aéreo con torpedos en Italia hay que buscarlos en la primera guerra mundial, cuando comenzó la segunda, la Regia Aeronáutica carecía de unidades de este tipo. Así, para poder oponerse más eficazmente a la Royal Navy, se tuvo que montar rápidamente una unidad experimental que recibió su bautismo de fuego el 15 de agosto de 1940 cuando 5 SM-79 atacaron unidades británicas surtas en Alejandría. Este ataque realizado por los Comandantes Buscaglia, Copello, Dequal, Fusco y Rabone fue el germen de una de las secciones más eficaces que lucharon en el ejército italiano durante la guerra, y esto a pesar de contar con escasísimos medios, pues por algo se llamaban "los cuatro gatos".

 

El 132º Grupo

 

Esta afamada unidad creada el 1 de abril de 42 fue el resultado de fundir las ya veteranas 281ª y 282ª Escuadrillas bajo el mando del Comandante Buscaglia, para entonces ya poseedor de 5 medallas de plata y una cruz de hierro 2ª clase, quien reunió a sus órdenes tanto a pilotos veteranos como Graciani y Faggioni como a novatos. Tras el necesario periodo de readaptación y adiestramiento en Littoria, el grupo fue destinado ya en estado operativo a Sicilia, donde se dividió en dos escuadrillas: la 278ª y la renovada 281ª con su centro de mando en Gerbini y dos aeródromos en Catania y Castelventrano. La situación de estas unidades y otras muchas hasta sumar 140 aparatos tenía como objetivo la interrupción del aprovisionamiento a la isla de Malta, la cual con sus aviones y submarinos era una espina clavada en las rutas de suministros del eje con África. Por fin en junio recibió su bautismo de fuego cuando se le ordenó interceptar el convoy que procedente de Gibraltar (Operación Harpoon) intentaba junto a otro de Alejandría (Operación Vigorous) llegar a Malta.

 

Operación Harpoon y el 132º Grupo 

 

Concebido para llegar a la asediada Malta el convoy que partió del peñón de Gibraltar la noche del 11 de junio tenía una escolta realmente poderosa compuesta por 17 destructores, el acorazado Malaya, portaviones Eagle y Argus, cruceros Kenya, Liverpool, Charybis y Cairo, además de numerosas unidades menores que protegían a seis mercantes (Taninmbar, Brudwan, Chant, Kentucky, Troilus y Orari). Tenía un plan muy simple: llegar al canal de Sicilia para dejar proseguir hasta Malta a los mercantes escoltados por el crucero antiaéreo El Cairo y 9 destructores, pues pensaban erróneamente que la marina italiana eludiría el ataque, ¡no podían estar más equivocados!.

 

 El 14 de junio el convoy empezó a sufrir los ataques de los aparatos estacionados en Cerdeña (bombarderos, torpederos e incluso cazas CR.42 armados con bombas) los que consiguieron tocar gravemente al Liverpool (se tuvo que retirar a Gibraltar) y hundir el carguero Taninmbar.

 

Esa misma tarde, ya dentro del alcance de los aviones de Buscaglia, 14 SM-79 procedentes de Castelventrano se lanzaron al ataque escoltados por 7 MC.202 y 17 RE.2001. Tras evitar la CAP, la AA y lanzar sus torpedos contra los mercantes ninguno de estos alcanzó su objetivo (quizás fuesen defectuosos) y mientras tanto el aparato pilotado por el Teniente Neri se desplomaba en el mar tras ser alcanzado por la AA pereciendo todos sus tripulantes.

 

 El 15 de junio, El Cairo, 9 destructores y los restantes mercantes se internaron en el canal de Sicilia para encontrarse a las 05:39 AM con la VII División naval italiana compuesta por los cruceros Eugenio di Savoia (buque insignia del Almirante Alberto Da Zara) y Montecuccoli además de 5 destructores. La flota italiana se lanzó sobre la británica, iniciándose un furioso combate que causó daños en el Cairo y en los destructores Partridge y Beduin mientras que el destructor italiano Vivaldi quedó severamente dañado.

 

Para entonces, nuevos ataques de la RA y la Luftwaffe hundieron al Chat, tocaron gravemente al petrolero Kentucky y dejaron prácticamente inutilizado al Brudwan, los que no tardarían en ser rematados por otra oleada de aviones.

 

Mientras estos combates se sucedían, el 132º se encontró con que solo tenía "tres" torpedos disponibles que fueron armados en los SM-79 de Buscaglia, Aichrner y Camera. Estos se dirigieron a la isla de Pantellaria donde tras repostar atacarían a los británicos. Sin embargo, durante el trayecto, unos Beaufigther de Malta dañaron el avión de Camera de tal manera que tras aterrizar en la isla no pudo despegar. Así los dos aparatos restantes atacaron al convoy. Buscaglia remató al Brudwan con su torpedo y Aichner se dirigió en solitario contra el tocado HMS Bedouin, que respondió con su AA consiguiendo derribar su aparato, pero el torpedo ya estaba lanzado y alcanzó la sala de máquinas y mandó al fondo del mar al destructor británico en 5 minutos (36-15ºN/11-30ºE). Perecieron 28 hombres de la tripulación y 213 fueron recogidos por unidades italianas junto a Aichrner, pasando el resto de la guerra en campos de prisioneros de Alemania. Curiosamente el Comandante B. G. Scurfield falleció el 11 de abril de 1945 cuando marchaba en una columna de prisioneros y aviones ingleses la ametrallaron por error.

 

El resto del convoy prosiguió viaje, pero antes de entrar en la isla penetró en un campo de minas que dañó al Orari, hundió al destructor Kujawiak y averió a otros cinco.

 

Resumiendo, los ingleses sufrieron el hundimiento de 4 mercantes y dos destructores además de daños en dos cruceros, un carguero y cinco destructores con lo podemos decir que si el ataque inicial con toda la escuadrilla no hubiese fallado, esta derrota británica seguramente se hubiera convertido en un gran desastre para la flota inglesa.

 

En cuanto al otro convoy procedente de Alejandría se tuvo que retirar ante la salida de la flota italiana y los ataques de la RA y la Luftwaffe que le causaron la pérdida de un crucero, tres destructores y dos buques menores, además de daños en tres cruceros, una corbeta, dos vapores y un buque señuelo. Los italianos perdieron el crucero Trento y sufrieron averías en el Littorio.

 

Conclusiones

 

Aunque los italianos ya conocían las posibilidades del ataque desde aviones con torpedos, no fue hasta el 25 de julio de 1940 (un mes después de declarar la guerra a Francia e Inglaterra) cuando formaron la primera unidad de este tipo que sufrió una gran carestía de medios.

 

Una vez que se formaron más unidades de aviones torpederos, rápidamente se descubrió el gran número de fallos que registraban sus armas y que causaron gran cantidad de ataques sin resultados.

 

Los italianos utilizaron el SM-79 I y SM-79II para sus ataques pero este avión, aunque se comportó admirablemente, se quedó obsoleto según avanzaba la guerra y su sustitución por el Cantz Z 1018 Leone nunca llegó a realizarse.

 

La coordinación de la RA y de la Marina nunca fue muy eficiente y aunque los pilotos se comportaron como profesionales los altos mandos no solían estar a la altura.

 

Es decir que Italia, aunque intentó potenciar el ataque con aviones torpederos no pudo compensar, a pesar de su éxito, la ausencia de portaviones en su flota. Si tomamos el ataque al convoy Harpoon como ejemplo podemos ver que si la flota italiana utilizase tan solo un portaviones, podría mantener una presión constante sobre la flota inglesa y no espaciar tanto los ataques, además de mantener sobre si misma un paraguas de protección y no depender de la RA, que jamás pudo cumplir con la famosa frase acuñada por Mussolini "el portaviones Italia".

 

Para finalizar, aunque tampoco se puede asegurar que la finalización del portaaviones Achila hubiese cambiado la balanza en la guerra del lado italiano, si habría potenciado a su flota, la cual respaldada por los éxitos de sus Aerosiluranti hubiese ofrecido una resistencia aún más dura a la Royal Navy.

 

 

Fuente: http://www.de1939a1945.com