27 de noviembre de 2019
AVIONES RUSOS DEL “DÍA DEL JUICIO FINAL”: ¿UNA REALIDAD?
En
Rusia, cada vez más aparece "accidentalmente" información acerca de
una "aeronave de la venganza". ¿De qué se trata?
Los
aviones rusos del “Día del Juicio Final” llevan mucho tiempo calentando la
imaginación de expertos y blogueros militares, escribe el diario Svobodnaya
Pressa. Surge la sensación de que así se muestran discretamente estas
aeronaves, en la mejor tradición del KGB de la URSS.
Búnker
volador
Se
trata de una aeronave avanzada y altamente clasificada, en la cual
supuestamente subiría el presidente del país eslavo en caso de una guerra
nuclear, si se destruyera toda la infraestructura terrestre. Junto con el alto
mando de las Fuerzas Armadas de Rusia, el presidente gestionaría el lanzamiento
de los misiles balísticos desde los silos y submarinos.
Este
vehículo aéreo sería capaz de permanecer en el aire durante unos días o aún
más, si hay posibilidad de repostaje.
La
idea de crear tal avión nació durante la Guerra Fría en los EEUU. La empresa
Boeing construyó en la década de los 70 cuatro E-4B, aviones de mando y control
de la Fuerza Aérea de los EEUU conocidos como “Vigilantes Nocturnos”
(Nightwatch). Desde entonces, uno de ellos acompaña permanentemente al
presidente de los EEUU durante sus viajes.
Estas
aeronaves están atendidas por un escuadrón especial de la Fuerza Aérea. Entre
sus características se destacan la falta de ventanillas y una
"convexidad" sobre el carenado delantero en el cual se ubica el
equipo de comunicación.
Además,
los E-4B disponen de un cable de longitud de varios kilómetros que sirve para
ponerse en contacto con los submarinos al ser tirado del avión en pleno vuelo.
Los
informes más recientes acerca de este “búnker volador” de los EEUU fueron
publicados al comienzo de 2015, cuando se anunció el plan de actualizar sus
sistemas de comunicación.
¿Y
qué hicieron los rusos?
La
URSS empezó el proyecto del desarrollo de sus propios aviones del “Día del
Juicio Final” en la década de los 80. Su construcción contó con la
participación de la Corporación de Producción “Poliot”, uno de los mayores
fabricantes de aviones y naves espaciales del país. Así, a principios de los 90
salió a la luz una serie de seis vehículos aéreos que en la actualidad se basan
en el aeródromo militar Chkálovski.
No
obstante, hay escasa información acerca de sus características. Se sabe que dos
de ellos, los IL-82 (Il-76VPK), alcanzan una velocidad de 780 kilómetros por
hora y tienen un alcance de vuelo de 6.800 kilómetros. Además, según un portal
dedicado a los equipos militares, son aeronaves "adicionales" que
sirven para distraer la atención de las "principales".
Otros
son los Il-80 (Il-86VKP) de velocidad de 850 kilómetros por hora y de alcance
de vuelo de 3.600 kilómetros. Según varias fuentes, uno de ellos voló en 1990
al cosmódromo Baikonur para someterse a unas pruebas. A bordo, fue ordenado el
lanzamiento de un misil balístico que alcanzó con éxito el objetivo potencial.
El
exterior de los aviones rusos se asemeja a los construidos en los EEUU. También
tienen una "convexidad" en la "cabeza", tampoco disponen de
ventanillas. Se informa que están equipados con una antena larga que posibilita
ejercer control sobre los sumergibles.
Además,
los Il-80 disponen de una antena de recepción de onda corta; antena de
transmisión de onda corta ubicada en el radomo radiotransparente; antena de
transmisión de onda superlarga de cable de 4.000 metros de largo; antena de
transmisión de onda superlarga, ubicada en el plano fijo vertical; antena de
comunicación de relé, ubicada en la parte superior y la parte inferior del
fuselaje; antena de onda ultracorta y antena de comunicación con las unidades
de las Tropas de Misiles de Designación Estratégica (RVSN).
La
característica más interesante de los Il-80 es su sistema unificado Zveno que
coordina el trabajo de las antenas del avión con otras antenas, proporcionando
comunicación con las unidades estratégicas tanto subterráneas como terrestres.
Status-6
Las
aeronaves rusas del "Día del Juicio Final" siguen modernizándose.
Así, en 1991 el Ministerio de Defensa de la URSS contrató a la empresa Poliot
para la construcción del sistema de comunicación de segunda generación Zveno-2
y a la Oficina de Diseño Iluishin para la actualización de los cuatro Il-80.
Sin
embargo, tan solo en 2015 fueron llevados a cabo pruebas del sistema Zveno, que
por el momento integra el equipo del primer Il-80 modernizado.
Además,
en noviembre de 2015 aparecieron los primeros informes mediáticos de Status-6, sistema
nuclear oceánico multipropósito. A primera vista puede parecer que no tiene que
ver nada con los aviones y los equipos de a bordo. No obstante, Status-6 presupone
la construcción de submarinos no tripulados con cargas nucleares. Estas cargas
podrán separarse del sumergible, acercarse a las costas enemigas y destruir
toda la infraestructura costera. Lo más interesante es que estos submarinos
drones con ojivas nucleares serían gestionados desde el propio avión del “Día
del Juicio Final”.
Asimismo,
actualmente la empresa Poliot está desarrollando un nuevo sistema de
telecomunicación de tercera generación, Zveno-3S, que podría instalarse sobre
las nuevas aeronaves que se construyen sobre la base del avión tetrarreactor de
fuselaje ancho Il-96.
Fuente:
https://mundo.sputniknews.com