12 de enero de 2021

¿CÓMO SE FORMAN LOS PILOTOS DE CAZA DE LA FUERZA AÉREA?

 

 

 

Con la misión de contribuir a la defensa aérea de nuestro país, la Fuerza Aérea Argentina (FAA) cumple cada año con la tarea formar y adiestrar a los jóvenes aviadores militares en el arte del combate aéreo, quienes deberán calificar para obtener su especialidad, que les permitirá luego integrar alguno de los escuadrones de combate operativos de la Institución.

 

Para ello se seleccionan previamente a los oficiales con mejores promedios de egreso de la Escuela de Aviación Militar, quienes luego son reclutados para realizar el Curso de Estandarización de Procedimientos para Aviadores de Combate (CEPAC) en la IV Brigada Aérea "El Plumerillo", con asiento en la provincia de Mendoza.


 

En esta Unidad, también conocida como la "Cuna de la Aviación de Caza", los oficiales cursantes reciben durante el lapso de un año aproximadamente la instrucción académica y de vuelo correspondiente en los Sistemas de Armas IA-63 Pampa II y T-6C Texan II, pertenecientes a los Escuadrones I y II del Grupo 4 de Caza.

 

Teoría y práctica

 

El CEPAC ha sido estructurado para desarrollar al máximo las capacidades de los cursantes a partir de un plan de estudios que comprende la incorporación de conocimientos teóricos y prácticos.

 

Durante el desarrollo de este proceso cumplen un papel fundamental los Instructores de vuelo, quienes exigen a cada cursante y evalúan constantemente sus avances en el proceso de aprendizaje.

 

Los jóvenes aviadores militares que egresan del Curso, obtienen la especialidad de "Piloto de Caza-Bombardeo", luego de haber completado los patrones de vuelo de Formación Táctica, Maniobras Básicas de Combate, Maniobras de Combate Aéreo, Tiro Aire-Aire, Tiro y Bombardeo y Táctica Aire-Superficie.

 

Para cumplir con este objetivo, se selecciona a su vez a los Instructores de los escuadrones de combate de la Fuerza Aérea, dada su sólida experiencia y trayectoria profesional, que incluye en algunos casos la participación en comisiones de intercambio con escuadrones de instrucción de los Estados Unidos, Italia y España. Por su parte, estos países envían instructores asesores, quienes brindan apoyo al proceso formativo en los Escuadrones.

 

Avión de entrenamiento

 

El IA-63 Pampa II es un avión de entrenamiento y ataque ligero, biplaza, de ala alta, mono turbina y con toberas de ingreso de aire al motor a ambos lados de la cabina de mando.

 

En servicio desde el año 2005, mantiene las premisas esenciales de la versión original introducida a fines de los años '80 (IA-63 Pampa I), como su probado diseño, confiabilidad, robusta estructura y características estables de vuelo.

 

Sin embargo, presenta significativas prestaciones técnicas y operativas que lo diferencian de su predecesor y lo equiparan con aviones de entrenamiento en servicio activo actualmente en otros países: Mantiene la capacidad de entrenamiento avanzado, pero pone mayor énfasis en el entrenamiento con armas y el combate. Incorpora una electrónica avanzada y una central eléctrónica mejorada. Dispone de una aviónica integrada de última generación. Es una versión más potente, con un tiempo medio de funcionamiento mejorado, mayor rendimiento, durabilidad y facilidad de mantenimiento.

 

Salto tecnológico

 

La incorporación progresiva de los T-6C Texan II a partir del año 2017 significó un importante salto tecnológico para la Fuerza Aérea Argentina, al tener la Institución la posibilidad de contar con la última tecnología disponible para la instrucción aérea de los futuros aviadores militares y pilotos de combate.

 

En tal sentido, la incorporación de estos modernos entrenadores tuvo un efecto inmediato en la calidad de la formación del personal, debido a que presenta una plataforma que satisface ampliamente con las exigencias y requerimientos de la instrucción aérea. Fue evaluado por la Fuerza Aérea y resultó la mejor opción del mercado internacional en este segmento, debido a las diversas prestaciones que presenta, su versatilidad y alta capacidad operativa.

 

Permite un uso eficiente y confiable de los medios de acuerdo a la complejidad de cada una de las etapas previstas en el plan de instrucción.

 

La incorporación de esta plataforma en las principales fuerzas armadas de varios países, entre ellos los Estados Unidos como su principal usuario, ha colocado la formación de los aviadores militares argentinos en la vanguardia de la región.

 

Fuente: http://www.laprensa.com.ar