Por Sara Burgos
Hace un siglo, en 1915, Toledo
fue una vez más protagonista de un capítulo de la historia de España, en esta
ocasión, por ser la primera ciudad del país fotografiada desde un avión. El
aparato salió del aeródromo militar de Cuatro Vientos de Madrid y terminó
aterrizando de emergencia en un prado de ovejas.
Cien años después, esas
instantáneas son "de un valor incalculable" a nivel nacional, por ser
las primeras tomadas desde un avión, y a nivel local, porque permiten
reproducir por vez primera la imagen de Toledo a vista de pájaro, según explica
en una entrevista con la Agencia Efe Eduardo Sánchez Butragueño, autor del
exitoso blog “Toledo Olvidado”, que ha rescatado las fotografías.
El avión desde el que se
fotografió la ciudad, durante la I Guerra Mundial, era militar, probablemente
modelo "Flecha", una reproducción desarrollada en España en 1915 del
avión austríaco Lonher, del que se montó una primera serie de seis unidades en
el aeródromo de Cuatro Vientos.
Sánchez Butragueño expone que se
debió elegir Toledo como lugar para sobrevolar al ser una ciudad también con
instalaciones militares, como por ejemplo el Alcázar, sede de la Academia
Militar. El piloto de la aeronave fue el Capitán Juan Vallespín Zayas y el
fotógrafo fue el Capitán.
Precisamente, fue el hijo del Capitán,
Ricardo Vallespín, el que en los años 80 donó las imágenes al Ministerio de
Defensa y las acompañó de una carta en la que incluyó una de las anécdotas del
vuelo que contó su padre: el aterrizaje de manera improvisada en un prado en el
que pastaban unas ovejas. Tras aterrizar, el pastor rompió dos costillas al
piloto arremetiendo contra él al grito de "¡Estos señoritos de Madrid, que
me matan a las ovejas!".
Tiempo después, en 1917,
Vallespín tuvo menos suerte y falleció en otro accidente de aviación, cinco
minutos después de despegar.
El autor del blog “Toledo
Olvidado” también expone el valor de las fotografías, "de gran nitidez y
resolución", para observar la trama urbana de la ciudad de Toledo, los
caminos históricos que conducían a ella, el entorno natural, el río o los
cigarrales. "Aportan información importantísima para estudiosos del
urbanismo, del medio ambiente, de la historia, de la arquitectura, de la
fotografía...", afirma.
Entre otros edificios, se
aprecian los restos del desaparecido Monasterio de San Servando, que se situaba
cerca del castillo del mismo nombre y que fue destruido al edificar el Hospital
Provincial en 1927. También puede verse la traza desde el aire de la calzada
romana o Vía Flaminia, que atravesaba los terrenos de la actual Academia de
Infantería y en su trazado final necesitaba descender una gran cota hasta el
río Tajo, por lo que era necesario rodear el peñón del Castillo de San Servando
que, por ello, "tenía un altísimo valor defensivo y estratégico",
explica Sánchez Butragueño.
Actualmente, las fotografías, de
las que tuvo conocimiento a través del Coronel José Luis Isabel, las conserva
el Centro Cartográfico y Fotográfico del Ejército del Aire.
"Las fotografías no vienen a
ti por sí mismas. Es una tarea de hormiguita, basada en tres pilares: la
constancia, la paciencia y la intuición", afirma Sánchez Butragueño, que
ha divulgado desde febrero de 2008 unas 13.000 fotos históricas de la ciudad en
su blog, el cual ha recibido hasta el momento casi un millón y medio de visitas.
Además, ha publicado dos libros
financiados por "700 amantes de Toledo" a través del micromecenazgo.
"Toledo interesa más de lo
que uno pudiera imaginar, aquí, en España y en el extranjero", señala el
autor del blog que, aunque es licenciado en Ciencias Ambientales e Ingeniero
Técnico Agrícola, trabaja como responsable del área Social y Cultural de la
empresa Soliss Seguros.
Fuente: https://www.lainformacion.com;