Por Nikita
Petrov
Fue el
primer bombardero en el que, para “aparcar” se tenía que utilizar un ancla.
El prototipo
del bombardero de gran autonomía TsKB-26 hizo su aparición en 1935. Usaba
partes del fuselaje y de la cabina del caza TsKB-12 o Polikarpov I-16, junto
con unas nuevas alas con perfiles metálicos en U soldados y tubos. Era un
monoplano de ala baja, propulsado por dos motores radiales Gnome-Rhône Mistral
Major de 800 cv.
Bajo la
designación militar DB-3, fue ampliamente utilizado por la ADD (Aviación de
Bombardeo de Largo Alcance) y la V-MF (aviación Naval). Permaneció en servicio
hasta bien entrada la II Guerra Mundial y llegó a participar en alguno de los
primeros ataques contra Berlín.
Modificación
naval
Como
explica la web Airpages.ru, en 1937 se creó el avión DB-3T en una modificación
naval, capaz de transportar un torpedo del tipo 45-36 en una eslinga externa
(el primer número es el calibre del torpedo en centímetros, el segundo es el
año de su puesta en servicio) con una masa de ojiva de 200 kg y una masa total
de 940 kg. El equipamiento del avión DB-3T permitía lanzar este torpedo
utilizando métodos de lanzamiento de torpedos a baja o gran altitud. En el
primer caso, el torpedo 45-36-AN (aviación de baja altitud) se dejaba caer
desde una altura de 30 metros a una velocidad aproximada de 320 km/h.
Era
imposible lanzar un torpedo por debajo o por encima de esta altura, ya que en
este caso podría romperse al chocar contra el agua, o hundirse en las
profundidades. El lanzamiento de torpedos a baja altura proporcionaba la mayor
probabilidad de acertar en un blanco marino, pero requería un alto nivel de
entrenamiento de la tripulación y las excelentes características de vuelo y
maniobra del avión. Durante el lanzamiento de torpedos a gran altitud, el avión
DB-3T lanzaba un torpedo 45-36-AV (aviación de gran altitud) desde una altura
de al menos 300 metros, tras lo cual descendía en paracaídas y, al amerizar,
comenzaba a circular en círculo vicioso sobre el rumbo del blanco.
Además
del armamento torpedero, los DB-3T también disponían de armamento convencional
de bombardero, lo que permitía utilizarlos como bombarderos y para colocar
minas. Este avión también se utilizaba como avión de reconocimiento naval de
largo alcance.
Los
aviones DB-3T adoptados por la aviación de la Armada de la URSS se convirtieron
en los primeros bombarderos torpederos soviéticos de producción en serie que
cumplían plenamente los requisitos exigidos para ellos. Sobre su base técnica
en 1939-1940, organizativa se formó un nuevo tipo de aviación de la Armada de
la URSS - la aviación portadora de torpedos minadores, destinada a destruir los
buques enemigos con torpedos y bombas, minar las vías marítimas enemigas y los
accesos a bases navales.
Sin
embargo, los aviones DB-3T sólo podían despegar de aeródromos terrestres, cuya
creación en aquella época, sobre todo en las condiciones de despliegue de las
flotas del Norte y del Pacífico, estaba plagada de grandes dificultades. Esta
circunstancia determinó la aparición a principios de 1938 de un nuevo avión
DB-3TP. Se trataba de un DB-3T de serie montado sobre flotadores. El diseño de
la fijación de los flotadores al avión garantizaba su rápida sustitución por un
tren de aterrizaje de ruedas convencional.
La
versión flotante llevaba a bordo equipos marinos especiales (ancla de fondo con
bolardo, cabrestante de ancla, etc.), que garantizaban el funcionamiento del
avión cuando estaba operando en el mar. El armamento del DB-3TP era el mismo
que el del avión DB-3T.
Las
pruebas de vuelo del avión DB-3TP con dos motores M-86, llevadas a cabo en el
verano de 1938, demostraron que la instalación de flotadores reducía
considerablemente la velocidad del nuevo avión: con un peso de vuelo normal de
7550 kg y un torpedo 45-35-AV, su velocidad máxima llegó a ser igual a 343
km/h. Según la técnica de pilotaje, el nuevo avión resultó ser bastante
sencillo y podía ser dominado rápidamente por pilotos medianamente cualificados
que habían sido entrenados en el avión de reconocimiento flotante KR-6P.
En
conclusión, basándose en los resultados de las pruebas estatales, se observó
que el avión DB-3TP podía ser recomendado para su adopción por la aviación
naval en las variantes de lanzatorpedos de alta y baja altitud, bombardero de
alta velocidad y avión de reconocimiento de largo alcance.
Sin
embargo, este avión no se fabricó en serie. Lo complicado de su funcionamiento
en comparación con la versión terrestre, especialmente a flote, se observó
cuando se hizo mucho más difícil colgar bombas, torpedos y mantener la central
eléctrica del avión. Además, para el funcionamiento normal de este tipo de
aviones, era necesario disponer de gradas, hangares, instalaciones de
almacenamiento de municiones y combustible en tierra. Al final, los principales
esfuerzos se centraron en ampliar la red de aeródromos terrestres, y en poco
tiempo el problema de la base de los aviones DB-3 quedó resuelto en todas las
flotas.
Fuente:
https://es.rbth.com