Durante
este mes de Diciembre, y para terminar esta año tan horrible en muchos
sentidos, os voy a proponer varias historias de antiguos alumnos del colegio
que estoy seguro de que harán las delicias de los aficionados a la aviación y a
la historia de la guerra en el aire. Empezaremos hoy con el primer caído del
Ejército del Aire, pilarista, y todo un ejemplo de español, hidalgo y valiente.
Espero que disfrutéis de su historia.
Una
familia numerosa
Luis
de Alcocer y Moreno-Abella había nacido en Orduña (Vizcaya) el 5 de Octubre de
1919. De Orduña era también su padre, D. Alberto Alcocer y Ribacoba, que fue
alcalde de Madrid en los periodos de 1923 a 1924 y de 1939 a 1946, Procurador
en Cortes y Secretario General del Banco de España.
Alberto Alcocer Ribacoba.
El
matrimonio de D. Alberto Alcocer y Ribacoba y María Cristina Moreno y Abella,
casados en 1909, tuvo 7 hijos además de Luis: María Luisa (1910-1976), José
María (1911-1993) -pilarista de la promoción de 1928-, María del Carmen
(1913-2004), María Teresa (1915-2003), Alberto (muerto en 1989) -de la
promoción de 1932-, Agustín -antiguo alumno de la promoción de 1939- y María de
la Soledad (1923-2010). María Teresa fue la madre de Alberto, Fernando y Luis
Giquel Alcocer, de las promociones de 1955, 1957 y 1963, respectivamente. Y
María Luisa fue la madre de Alfonso y Alberto Cortina Alcocer, de las
promociones de 1961 y 1963. Como vemos, todos los hermanos varones estudiaron
en el colegio, perteneciendo Luis Alcocer a la promoción de 1935.
Estalla
la Guerra Civil
Volviendo
a nuestro protagonista, tras salir del colegio, comenzó la carrera de leyes en
la Facultad de Derecho de la Universidad de Madrid. Cuando estalló el
Alzamiento Nacional se encontraba de vacaciones en Briviesca por lo que se
incorporó voluntario a la 25ª Centuria de la Falange de Burgos con la que
participó en varios combates en el sector de Villarcayo, en la divisoria
cantábrica, en Espinosa de los Monteros, La Lora y el valle de Bricia.
Recordatorio de D. Luis Alcocer y Moreno.
Trasladada
su unidad a finales de Febrero de 1937 al frente del Centro, participó en la
batalla de Guadalajara. Seguramente por influencia de su tío, el Teniente
Coronel de Aviación Luis Moreno-Abella y Gil de Borja, II Marqués de Borja -uno
de los pioneros de la Aviación Militar Española-, solicita en primavera ser
admitido para los cursos de piloto, incorporándose en Julio, al aeródromo de
Tablada (Sevilla). Posteriormente, es designado para asistir al 4º curso de
pilotos de aviación en Italia, y allí, en Falconara Marítima (Ancona), y
posteriormente en Foggia (Apulia), realizó las prácticas y pruebas previstas
para la obtención del título de “piloto de guerra”, y el de “caza”, siendo
promovido a Alférez a su regreso a España en Diciembre, y destinado a la 6ª
Escuadrilla del 3-G-3 de caza con apenas 18 años de edad.
Luchó
en la batalla de Teruel (Diciembre de 1937 – Febrero de 1938) y, más tarde, en
la batalla de Alfambra (Febrero de 1938). En Mayo de ese mismo año se incorporó
al primer curso de la escuela de Caza que se estableció en Gallur (Zaragoza), y
terminado éste, fue destinado al legendario grupo de caza, 2-G-3, al mando del
entonces Capitán Ángel Salas Larrazábal, y con él participó en las operaciones
del verano de 1938 en Extremadura, donde a la ofensiva nacional de Julio, que
llevó a la conquista del valle de La Serena, respondieron los republicanos con
duros ataques en Cabeza de Buey, en Agosto.
Polikarpov I-16 "Rata".
La
primera victoria aérea de Luis de Alcocer tuvo lugar sobre Zarzacapilla
(Badajoz), el 2 de Septiembre, en un combate en el que el 2-G-3 derribó cinco
aviones enemigos, uno abatido por él, un Polikarpov I-16 Rata cuyo piloto se
salvó con el paracaídas; pocos días más tarde, el 13 de Septiembre, logró, tras
un largo combate, derribar un Chato sobre Monterrubio (Segovia).
Su
grupo fue trasladado al frente del Ebro donde en tierra se desarrollaban
durísimos combates con enorme desgaste de hombres y material por ambos bandos.
El 30 de Octubre, en un encuentro a poca altura, sobre Pinell (Tarragona),
derribó un Polikarpov I-15 Chato, y tres días más tarde, el 3 de Noviembre, en
un combate de su escuadrilla sobre Gandesa (Tarragona) con una fuerte formación
enemiga, luchó contra dos Chatos, derribando uno que, incendiado, cayó en un
olivar en la orilla del Ebro. En Diciembre de ese año ascendió a Teniente.
Polikarpov I-15 "Chato".
El
mando nacional esperaba una ofensiva en algún punto del amplio frente sur, y en
previsión de ello situó en el aeródromo de campaña de Posadas (Córdoba), una
escuadrilla de Fiat CR-32, el popular Chirri, a la que se unirían otras más
tarde. El 5 de Enero, fuerzas republicanas muy numerosas y dotadas de una
potente artillería y gran número de carros de combate rompieron el frente en el
sector de Peñarroya (Córdoba) y, ampliando la brecha, profundizaron hasta que
las reservas nacionales que acudieron, lograron rechazar a las fuerzas
atacantes. La lucha en el aire fue muy dura, y frecuentes los combates
entablados por los Fiat, que realizaban la protección de sus formaciones de
bombardeo, y llevaban a cabo ataques al suelo y a los Chatos enemigos que
trataban de impedirlo.
El
9 de Febrero, la escuadrilla de Alcocer desempeñaba el servicio de protección
de una misión de bombardeo cuando entró en combate con cazas enemigos, y tras
una larga lucha en la que se vivieron momentos dramáticos, Alcocer derribó un
Chato que fue a caer en las proximidades de Alcazarejos (Albacete). Con esta
victoria, la quinta, entraba Luis de Alcocer en la lista de los “Ases” de la
Aviación Nacional, y cerraba su cuenta particular, pues la guerra tocaba a su
fin y ya apenas se llevarían a cabo combates aéreos.
Combate aéreo entre aviones Fiat CR-32 nacionales y Polikarpov I-15 republicanos.
El 23 de febrero de 1939, Alcocer sería condecorado con la Medalla Militar Colectiva que portará orgulloso en la bocamanga de su uniforme junto a sus compañeros. Por sus méritos en campaña, también le fueron concedidas; una Cruz de Campaña, una Cruz de Guerra, dos Cruces al Mérito Militar con distintivo Rojo, la Medalla Italiana al Mérito Di Guerra y la Orden del Águila de Tercera clase para Oficiales.
La
Escuadrilla Azul
En
1940 ingresó en la Academia de Aviación, en León, formando parte de la primera
promoción del recién creado Ejército del Aire.
Cuando
en Agosto del año siguiente el Gobierno de España decidió enviar una
escuadrilla de caza expedicionaria a combatir a Rusia, la llamada Escuadrilla
Azul -al mando del ya Comandante Ángel Salas Larrazábal– formando parte de ella
marchó el Teniente Alcocer. Desde el aeródromo de Moschna esta unidad participó
en la ofensiva alemana sobre Moscú.
Miembros de la 1ª Escuadrilla Azul recibidos por el embajador español en Berlín.
Al
día siguiente del inicio de la operación “Tifón” -ofensiva de la Wehrmacht
hacia Moscú-, comienzan las operaciones de la escuadrilla. Sin apenas
adaptación al frente de guerra se realizan los primeros servicios de
protección. Alcocer participa en una primera misión de guerra con su
Messerschmitt Bf-109 dando cobertura a los Henschel Hs-123 en su incursión
hacia las líneas soviéticas, regresando de ésta, sin novedad.
En su segunda misión de guerra, el 2 de Octubre de 1941, parten a las 10:50 los cuatro Bf-109 españoles pilotados por Salas, Rubial, Allende y Alcocer, realizando nuevamente un servicio de protección de los Hs-123 y Bf-109. Regresando del frente, el Comandante Salas Larrazábal observa el fuego de las baterías antiaéreas alemanas contra varios aviones Mig-3 enemigos, por lo que intenta alcanzarlos sin poder hacerlo. Seguidamente, observa a varios bombarderos soviéticos Ilyushin DB-3 y nuevamente, al intentar disparar al enemigo las armas de su Bf-109 se le encasquillan. Es durante estas maniobras de combate, donde el Teniente Alcocer se queda sin combustible en su aparato, teniendo que realizar un aterrizaje forzoso encontrando la muerte en el impacto contra el suelo.
Componentes de la 1ª Escuadrilla Azul.
Otto
Weiss, Comandante en jefe alemán lo expresa de esta forma en una carta a la
familia:
“Después
de mantener una dura lucha con doce cazas enemigos a los que hacen retroceder,
vuelven a atacar a seis bombarderos enemigos siendo atacados ellos mismos por
cinco cazas soviéticos. La escasez de combustible del aparato de Luis después
del combate, hace que tenga que regresar quedándose a escasos seis kilómetros
del campo, teniendo que realizar un aterrizaje forzoso y debido al mal estado
del terreno el golpe del avión fue muy duro, ocasionándole un fuerte golpe en
el salpicadero del aparato, que arde inmediatamente siendo sofocado el incendio
por soldados alemanes que acudieron inmediatamente”. Añade Weiss, “que el
violento golpe causa en Luis una fractura en la base del cráneo, por lo que
poco después le encontraría la muerte”.
Messerschmitt Bf-109 de la Escuadrilla Azul.
Según
las investigaciones, el Teniente Luis Alcocer debió olvidarse de plegar el
punto de mira de su avión antes de impactar con el suelo. Este error fatal le
haría golpearse la cabeza con ella y fallecer en el acto.
Pilotos de la 1ª Escuadrilla Azul.
Luis
fue el primer piloto fallecido del Ejército del Aire y las Escuadrillas
Expedicionarias en Rusia, siendo condecorado por la Wehrmacht con la Cruz de
Hierro de segunda clase.
Sus
restos fueron enterrados, con honores militares, en el cementerio de Héroes, en
Werneuchen (Alemania).
Nota necrológica de Luis Alcocer Moreno del ABC del 4-X-1941.
Al
cabo de los años, su familia pudo localizar los restos mortales de Luis en
Alemania y repatriarlos para ser enterrados en Briviesca junto a sus padres.
Fuente: https://recuerdosdelpilar.com