18 de enero de 2019
EL RADIOGONIÓMETRO
Una de las ayudas electrónicas más antiguas en la
navegación es el Radiogoniómetro. Este instrumento, fue utilizado durante
décadas como ayuda para determinar la posición relativa de una nave. Su principio se basa en que las antenas,
respecto a la manera como ellas se comportan, lo hacen de igual forma ya sea
transmitiendo como recibiendo y además por el principio de que toda antena
emite o recibe las señales con mayor intensidad, cuando se orienta de cierta
forma en relación con el transmisor que emite o el receptor que recibe.
Funcionamiento del Radiogoniómetro
Invento de comienzos del siglo XX
Para los científicos e ingenieros de los primeros
años de la década de 1900, fue fácil imaginar que una antena especialmente
diseñada sería capaz de determinar con precisión la dirección de donde
provienen determinadas emisiones. La
aplicación inmediata era utilizar un receptor con su antena especial que
serviría como ayuda en la navegación, para que los navegantes pudieran de
terminar la ruta que seguían respecto a una estación transmisora o su posición
exacta en relación a dos o más estaciones transmisoras.
Antena típica de Radiogoniómetro
Instrumento de ayuda durante la paz...
Era obvio que si una nave aérea o marítima, podía
determinar su posición por ese medio, conociendo la ubicación de determinadas
transmisoras, también era posible determinar la ubicación relativa de una
estación transmisora si la posición de la receptora era conocida. Usando dos o más estaciones receptoras podía
conocerse la ubicación exacta de una estación transmisora desconocida.
Radiogoniómetro
Y durante la guerra...
Con esas dos formas de aplicación era más que evidente
la utilidad militar que tendría el Radiogoniómetro o Direction Finder en
inglés, aparte de la utilidad como ayuda en la navegación en tiempos de
paz. Se empleó de manera limitada
durante la Gran Guerra, pero como la radio, durante la Segunda Guerra Mundial,
estaba en pleno desarrollo su uso estaba totalmente extendido como medio de
comunicación y de entretenimiento.
Era de esperar que al comenzar la guerra y aún
antes, las emisoras clandestinas serían para los espías y agentes secretos, un
medio de transmitir información y, por tanto, los servicios de contraespionaje
y los policiales también, pensaron que el radiogoniómetro sería un instrumento
fundamental como apoyo para sus actividades.
ADF alemán usado en vehículos terrestres para el
rastreo de estaciones clandestinas.
Una antena muy particular
Generalmente, las antenas utilizadas por los
Radiogoniómetros son del tipo de cuadro o del tipo circular. La característica
de esas antenas hace que las señales se reciban con mayor intensidad cuando uno
de los bordes está dirigido hacia la estación transmisora. Debido a su forma, las antenas reciben con
mayor intensidad desde dos direcciones opuestas y para evitar esa ambigüedad se
utiliza una segunda antena que en el receptor refuerza las señales en la
dirección verdadera. Si bien los puntos de máxima intensidad no son fáciles de
determinar, los de mínima si lo son, es decir que una antena bien diseñada es
capaz de hacer desaparecer la señal al orientarla de manera apropiada.
Radiogoniómetro militar alemán. Nótese el amplio
espectro de frecuencias de HF que muestra el dial.
Los receptores
Los receptores usados en radiogoniometría tienen un
instrumento de medición para poder leer la intensidad de la señal, pero un
operador experto puede determinar la dirección por medios auditivos. En la práctica, las antenas se rotan
alrededor de una escala graduada en 360 grados de azimut, donde el operador lee
la dirección relativa de la ubicación de la estación recibida.
Otro modelo de Radiogoniómetro militar alemán.
Mejor que un sextante
En los años 30 el compás y el Radiogoniómetro eran
los dos únicos instrumentos de navegación de uso común en aviones y
barcos. Estos instrumentos les
permitían a los comandantes saber cuál era su posición relativa y rumbo, a
diferencia de las lecturas de posición tomadas con sextante, que requieren de
buena visibilidad para su uso, impracticable con mal tiempo y cielos nublados.
Usado por, y en contra, del arma submarina
Cuando las pérdidas de mercantes a manos de los
U-Boots llegaron a su máximo, los Aliados con sus Radiogoniómetros o HF/DF
(High Frequency/Direction Finding) apodado por ellos Huff-Duff, estuvieron en
condiciones de descubrir los submarinos alemanes y determinar su posición
exacta.
Los submarinos usaban mucho las comunicaciones,
tanto para transmitir su posición al Cuartel General como para coordinar los
movimientos con otros submarinos. Con el Radiogoniómetro barcos y aviones
triangulaban a los submarinos y podían establecer su posición exacta.
Antena de Radiogoniómetro en un U-Boot.
Al lado el periscopio de navegación.
Espionaje y contraespionaje
Las emisiones de las estaciones de radiodifusión se
utilizaban para determinar las posiciones de las naves, pero también se
cambiaban de lugar esas estaciones para engañar al enemigo. Sin embargo, había estaciones que siempre
transmitían desde el mismo lugar por pertenecer a países neutrales, por
ejemplo. Estaciones secretas subrepticiamente instaladas en el Ártico, por
ejemplo, se usaban también como referencia para la propia orientación de las
naves amigas, que conocían sus frecuencias y horarios de transmisión.
A la caza de los agentes secretos
Los servicios secretos alemanes, utilizaban cientos
de unidades móviles y estaciones fijas, equipadas con Radiogoniómetros para
determinar la ubicación de las emisoras clandestinas. Para ello, una vez que
las estaciones fijas determinaban la posición aproximada, empleaban dos o tres
vehículos con el propósito de triangular las posiciones y así poder sorprender
a los agentes y espías en plena faena de transmisión. Es por eso que en las películas se ha
utilizado muy repetidamente este método como recurso para mantener el suspenso.
La antena, instalada debajo de este Dakota R4D,
versión militar del DC-3, está protegida para reducir la resistencia al viento.
Instrumento de navegación de ayer y hoy
El radiogoniómetro o Direction Finder es un
instrumento que no se ha convertido en reliquia, por el contrario, ha sido
mejorado, su precisión se ha incrementado y su uso se ha automatizado para
brindarle al navegante una ayuda más efectiva. Los modernos ADF son digitales y
brindan los resultados inmediatamente, sin necesidad de mucho esfuerzo por
parte del navegante. Las antenas
también han sido modificadas.
Fuente: https://www.exordio.com