13 de noviembre de 2018
BOMBARDEO ATÓMICO DE NAGASAKI
La ciudad de Nagasaki era uno de los mayores
puertos del sur de Japón y era de importancia capital en tiempos de guerra
debido a su incesante actividad industrial, que incluía la producción de
material de guerra, navíos, equipos militares y otros materiales bélicos.
Las cuatro empresas principales de la ciudad eran
Steel and Arms Works, Mitsubishi Shipyards, Electrical Shipyards y Arms Plant,
que daban trabajo a cerca del 90 % de la fuerza laboral de la ciudad y que eran
responsables del 90 % de la industria de Nagasaki. Pese a que se trataba de una
gran ciudad industrial, Nagasaki se había salvado casi por completo de los
bombardeos aliados debido a su ubicación geográfica complicada para las oleadas
nocturnas guiadas por radar.
En contraste con Hiroshima, en Nagasaki casi todos
los edificios eran de construcción tradicional completamente en madera. Muchas
de las pequeñas industrias y establecimientos comerciales también estaban emplazadas
en edificios de madera o de otros materiales no diseñados para soportar
explosiones.
Nagasaki había crecido caóticamente, sin guiarse
por un plan urbanístico: las casas se construían al lado de edificios de
fábricas, todas juntas. Era sin duda la receta para el desastre. El día del
ataque nuclear sobre Nagasaki, cerca de 263000 personas se encontraban en la
ciudad, incluyendo 240000 residentes nipones, 10000 coreanos, 2500 trabajadores
coreanos reclutados, 9000 soldados japoneses, 600 trabajadores chinos
reclutados y 400 prisioneros de guerra aliados en un campo al norte de
Nagasaki.
La responsabilidad de lanzar la bomba sobre
Nagasaki le fue encomendada al piloto Charles W. Sweeney. En un principio, el
ataque nuclear estaba previsto para el 11 de agosto, pero no contra la ciudad
de Nagasaki, sino contra Kokura. Se adelantó finalmente la fecha al día 9
porque la previsión meteorológica era mala a partir del día 10. Se
transportaron tres bombas para la base de Tinian, con la marca F-31, F-32 Y
F-33 por fuera.
El bombardeo atómico de Nagasaki
El 8 de agosto de 1945 se realizó un ensayo general
con el Mayor Sweeney usando un B-29, apodado Bockscar, como avión de ataque. La
bomba F-33 se usó para probar los componentes y la F-31 para la misión del 9 de
agosto de 1945.
Llega el día del ataque atómico. A las 03h49 de la
mañana del 9 de agosto de 1945 el Bockscar, pilotado por Sweeney y su
tripulación, reciben en su bodega la bomba apodada Fat Man y salen rumbo a
Kokura como objetivo principal y con Nagasaki como objetivo secundario. El plan
de la misión para el ataque secundario era casi igual al de la misión del
bombardeo nuclear de Hiroshima. Sweeney despegó con la bomba ya armada, pero
con el sistema de protección eléctrica activado para evitar cualquier suceso
imprevisto.
Cuando la tripulación del Bockscar llegó a las
inmediaciones de Kokura, se encontró con grandes nubes y humo de los incendios
iniciados por una gran operación de bombardeo que se había realizado el día
anterior por más de 200 B-29 en la localidad vecina de Yahata. Aparte de eso,
la fábrica Yawata Steel Works quemaba adrede alquitrán de hulla con el fin de
producir humo negro. Las nubes y el humo se tradujeron en una cobertura del 70
% sobre el área de Kokura, oscureciendo inaceptablemente el punto de mira.
Tras realizar tres vuelos de reconocimiento sobre
la ciudad y con el combustible bajando por momentos, al resultar imposible
atacar Kokura, optaron por dirigirse hacia el objetivo secundario.
A las 07h50, hora local, suena la sirena antiaérea
en Nagasaki, pero se desactiva a las 08h30. Sobre las 10h53 se avistaron dos
B-29 (Bockscar y The Great Artist), pero los japoneses asumieron que se
trataría de una misión de reconocimiento y no se activó entonces alarma alguna.
A las 11:01, el artillero del Bosckscar, el Capitán
Kermit Beahan, tuvo acceso visual al objetivo del ataque. Se lanzó entonces la
bomba Fat Man, con un núcleo compuesto de 6,4 kg de plutonio, sobre el valle
industrial de la ciudad de Nagasaki. La bomba explotó 47 segundos después, a
503 metros de altura de la ciudad. La explosión se produjo a 3 km al noroeste
del epicentro planeado: fue contenida por el valle de Urakami y una gran parte
de la ciudad se vio protegida por las colinas que la rodeaban. Generó un calor
de casi 4000 °C y rachas de viento superiores a los 1000 km/h.
La tripulación del Bockscar antes de salir rumbo a
Nagasaki.
A pesar de que la bomba Fat Boy era más potente que
la usada en Hiroshima, el efecto no fue tan devastador por el efecto protector
del valle. Ahora bien, eso no quiere decir que no hubiera terribles
consecuencias.
Por ejemplo, de los 7500 operarios japoneses que
trabajaban en la fábrica de municiones de Mitsubishi, incluyendo a trabajadores
regulares y a estudiantes movilizados, 6200 murieron en el bombardeo atómico de
Nagasaki. Otros 17000 y 22000 que trabajaban en otras fábricas de armamento y
de la ciudad murieron también. Las estimaciones de muertos oscilan bastante,
entre 22000 a 75000.
En los días y meses posteriores a la explosión,
muchas personas fallecieron por culpa de los efectos secundarios del ataque
nuclear. Debido a la presencia de trabajadores extranjeros irregulares y de
soldados en tránsito, hay muchas discrepancias en el cálculo final de muertos
en Nagasaki a finales de 1945: una horquilla que va finalmente entre los 40000
y los 80000 muertos en total.
El radio de destrucción absoluta fue de casi 1 km,
seguido de incendios en toda la zona norte de Nagasaki, a 2 km al sur del
epicentro de la explosión de la bomba atómica. Esperemos que nunca se repita un
ataque tan brutal como este nunca más.
Fuente: https://segundaguerramundial.es