¿Qué
hicieron los soviéticos con él?
El avión F-5 fue una novedad en el mercado de armas y uno de los "pájaros" más dominantes en los cielos en ese momento.
Los
líderes soviéticos decidieron realizar una serie de pruebas para ver cómo el
MiG-21 (su último avión de combate de la época) competiría con el avión
estadounidense en combate aéreo. Para su sorpresa, el F-5 ganó todos los
combates aéreos simulados y los ingenieros asumieron que era superior al
MiG-21.
Entonces,
para recuperar la ventaja en el cielo, los ingenieros soviéticos utilizaron
todos los datos recopilados para el desarrollo de la próxima serie de aviones
de combate: el MiG-23.
“Capturar
el armamento enemigo y el proceso de evaluación es parte de la inteligencia
militar-tecnológica. Lo llevan a cabo todos los países del mundo cuando buscan
nuevas tecnologías, tipos de armas y, especialmente, analizan de cerca si hay
nuevos descubrimientos científicos en el producto”, dice Leonid Ivashov, Coronel
General retirado y doctor en ciencias históricas.
¿Cuándo
otros países capturaron armamento extranjero?
MiG-25 soviético
Un caso similar ocurrió con un piloto soviético llamado Viktor Belenko, quien desertó a Occidente en un nuevo avión de combate MiG-25 en 1976.
“El
hombre decidió huir del país y aterrizó en Japón en un nuevo avión de combate
MiG-25. Una vez que los estadounidenses obtuvieron el avión, lo desarmaron para
probar sus aleaciones de metal, cómo el avión era capaz de ser el avión de
combate más rápido y maniobrable del mundo en ese momento”, señala el experto.
Según
él, cosas similares sucedieron cuando los ejércitos entraron en Alemania en
1945. Después de la Segunda Guerra Mundial, los aliados tomaron del país
tecnologías del primer misil balístico del mundo, el FAU-2, esquemas de los
blindajes y motores de tanques más avanzados y tecnologías de bombas nucleares.
“Una
vez conocí a un jefe retirado de la CIA y me dijo que los estadounidenses
envidiaban las computadoras que la Unión Soviética usaba en el cosmódromo de
Baikonur en las décadas de 1960 y 1970. Su inteligencia requirió mucho esfuerzo
para obtener estas tecnologías en el pasado, pero no dijo si lo lograron o no”,
señala Ivashov.
¿Qué
armas quieren obtener los militares hoy?
El dron 'Hunter' de Rusia
A principios de la década de 2010, Rusia quería adquirir tecnologías de drones y compró varios tipos de vehículos aéreos no tripulados de Israel. Posteriormente, estas tecnologías se implantaron en los modernos drones “Hunter” y “Orión”. Y las tecnologías de drones son las que Rusia busca hoy.
“Los
estadounidenses, por su parte, quieren comprender nuestras tecnologías de
misiles hipersónicos y los medios de guerra radioelectrónica. En pocas
palabras, ¿cómo nos las arreglamos para “cegar” sus computadoras y sistemas de
navegación durante los encuentros en Siria”, agrega Ivashov.
Fuente:
https://www.rbth.com