El 23
de enero de 1962, el primer avión de reconocimiento radioelectrónico de largo
alcance soviético, el Tu-126, realizó su vuelo inaugural. En realidad, se
trataba del primer avión civil soviético (Tu-114) transformado en un aparato
militar.
Este
tipo de avión fue apodado como “seta” por su característico domo superior del
fuselaje que sostenía un radar de búsqueda.
La
necesidad de una máquina voladora de este tipo surgió a mediados de la década
de 1950, cuando la amenaza de un ataque con bombarderos estratégicos se hizo
realidad, según cuenta Rossíiskaia Gazeta. La construcción de sistemas de
defensa aérea con complejos de reconocimiento electrónico para avisar de la
aproximación de posibles aviones enemigos parecía extremadamente costosa dada
la enorme longitud de las fronteras de la URSS. Esto era especialmente cierto
en las regiones del norte. Entonces se decidió crear un sistema móvil que
pudiera desplegarse a bordo de un avión y fuera capaz de reconocer vastas zonas
durante el combate.
Como
portador de sistemas de detección de largo alcance se consideraron opciones
para el uso del bombardero Tu-95 y su versión de gran altitud, el Tu-96, así
como otros aviones. Sin embargo, debido a que el complejo de equipos Liana era
demasiado grande, ninguno de estos aparatos parecía adecuado para esta misión.
Además, era necesario colocar un equipo de operarios, que trabajaran en
compartimentos separados a bordo.
Entonces
decidieron que la mejor solución para estos fines sería el enorme avión
transatlántico de pasajeros Tu-114. Era lo suficientemente amplio y tenía una
capacidad de carga decente. Además, otros parámetros de la aeronave, como la
autonomía, la velocidad, etc. se adaptaban bien a lo que requería la misión. La
modificación del Tu-114 para fines especiales se encargó a la oficina de diseño
Andréi Túpolev y de la adaptación del complejo Liana para su uso en la aviación
se encargaron los Institutos de Investigación NII-17, OKB-373, NII-25 y
NII-101.
Juntos
iban a desarrollar el primer avión de detección por radar de largo alcance de
la URSS. Estas máquinas ya habían aparecido en los países de la OTAN, y la
Unión Soviética no podía quedarse atrás.
Los
trabajos comenzaron en 1958, y el gobierno exigía tener el avión listo para las
pruebas en el primer trimestre de 1961. Por cierto, en aquella época, los
diseñadores soviéticos ya tenían experiencia en la transformación de grandes
aviones militares en civiles, pero era la primera vez que se encontraban con la
tarea de convertir un avión civil en uno militar. Debido a esta circunstancia,
así como a otras dificultades, el desarrollo del prototipo se retrasó un poco.
El
avión estuvo listo para las pruebas en 1962, y el 23 de enero el prototipo
surcó los cielos por primera vez.
Un A-4E del USS Intrepid interceptando un Tu-126 sobre el mar Mediterráneo en 1973.
El interior del Tu-114 sufrió importantes cambios. La cubierta superior estaba dividida en compartimentos. El primer compartimento estaba ocupado por el ordenador de a bordo. También había estaciones de trabajo para los operadores, así como parte de las unidades del sistema Liana y el vestuario. El segundo compartimento se ha dejado vacío, para dar cabida a nuevos equipos en el futuro. El tercer compartimento albergaba el puesto de artillero de la unidad remota de popa (dos cañones AM-23, un radar Kripton y una mira telescópica). El cuarto compartimento albergaba la cabina de recreo. La quinta sección estaba ocupada por las unidades principales de la estación del Liana. La sexta sección albergaba unidades del sistema de radio Kristal. Encima del fuselaje, sobre el quinto compartimento había un pilón con un carenado giratorio para sostener una enorme antena de radar.
La
cubierta inferior del Tu-126 estaba equipada con sistemas y unidades de control
de aeronaves, así como con equipos de contramedidas electrónicas. Además, bajo
el “vientre” del avión se adjuntó la estación del sistema de refrigeración del
Liana.
Además
de detectar objetivos aéreos, el complejo volante también estaba equipado con
sistemas para detectar objetivos marinos. El Liana podía detectar un bombardero
a una distancia de 350 kilómetros y buques militares del tamaño de un crucero a
400 kilómetros. En caso de ser detectado, el avión podría enviar una señal
codificada a los sistemas de defensa aérea terrestre o naval a distancias de
hasta 2.000 kilómetros. Para aquella época, fueron unas características
impresionantes.
Vladímir
Dobrovolski realizó la mayor parte de todos los vuelos de prueba: durante los
tres primeros años de funcionamiento del Tu-126, pilotaba el avión hacia el
norte para hacer prácticas de la interacción con las fuerzas de defensa aérea.
Al
final, el 30 de abril de 1965 el sistema de defensa de misiles antiaéreos
Tu-126 fue aceptado para el servicio de las tropas de la defensa aérea nacional
por un decreto especial del Consejo de Ministros. En 1966 comenzó el
equipamiento del 67º escuadrón independiente de defensa de misiles antiaéreos.
La base y el aeródromo del Tu-126 estaban situados cerca de la ciudad de
Šiauliai, en la RSS de Lituania. Aquí se establecieron dos escuadrones de
cuatro aviones cada uno. Junto con el prototipo, que estaba estacionado allí,
el escuadrón contaba con otros nueve aviones.
El
sistema Liana se actualizó repetidamente a medida que los países de la OTAN
cambiaban periódicamente sus tácticas. Por ejemplo, para engañar a las defensas
aéreas soviéticas, comenzaron a volar a gran velocidad, pero a una altitud
extremadamente baja. Sometiéndose a constantes actualizaciones, el Tu-126
sirvió bastante tiempo, hasta 1984 cuando fue retirado del servicio. Al mismo
tiempo, no hubo ni un solo accidente de esta aeronave. Resultó ser bastante
fiable, aunque de vez en cuando se producían pequeñas averías.
Fuente:
https://www.nps.gov