¿Cómo
respondieron los estadounidenses a los retos de su época? En su mayoría, como
todos los demás, pero con más entusiasmo, al estilo estadounidense.
A
mediados de 1930, en los EEUU y en Gran Bretaña, el portaaviones era
considerado un arma muy poderosa, pero tenía la desventaja de casi no tener
defensas. Sin embargo, los estadounidenses llegaron a diferentes conclusiones
de ese hecho. Mientras que los británicos decidieron añadir al portaaviones a
la flota de batalla y protegerlo con los cañones antiaéreos de los acorazados y
con cruceros escolta, los estadounidenses pensaron que sería mejor hacer que
los portaaviones fuesen independientes y permitirles operar de esta forma,
lejos de la fuerza principal de la flota. Los estadounidenses estimaron que un
portaaviones con varios barcos escolta sería más difícil detectar que un
escuadrón enorme.
En un
intento de darle cierta protección a los portaaviones, la Marina y el
Departamento de Aeronáutica (la contraparte estadounidense del Ministerio del
Aire británico) organizaron competencias para probar un nuevo caza embarcado
casi cada año. Lo que más dificultaba la evaluación de su eficacia era entender
cómo un caza podía proteger a la flota en primer lugar. Por esta razón, los
requerimientos de diseño cambiaban todo el tiempo: de dos asientos o de un
asiento, de largo alcance o de corto alcance, un caza bombardero o un caza de
reconocimiento. A veces, los requerimientos eran bastante extraños, como
sucedió con el caza ultra ligero jockey.
De vez
en cuando, los monoplanos formaban parte de las competencias. Sin embargo, los
requerimientos de la Marina hacían que fuese imposible ganarle a los biplanos.
Dos aviones debían entrar en un mismo elevador y los monoplanos no podían usar
alas plegables debido a su debilidad estructural. Además de eso, la velocidad
de aterrizaje no podía exceder los 100 km/h, el avión debía realizar la carrera
de despegue en una zona muy pequeña de la cubierta, etc. No se necesitaba una
gran velocidad.
Tras
todas las inconsistencias de diseño, tanto en los EEUU como en Gran Bretaña,
muchos expresaron sus preocupaciones por la necesidad de contar con un caza
"puro". Los ejercicios y los estudios teóricos demostraban
sistemáticamente que un avión como este no sería útil en enfrentamientos
navales reales. Sin embargo, los estadounidenses no pudieron renunciar del todo
a este tipo de avión debido a la situación estratégica.
Empecemos
con su plan general para la guerra naval contra su potencial adversario: Japón.
Los estadounidenses creían que si estallaba una guerra, empezaría con los
japoneses atacando las Filipinas. Los EEUU tenían una base poderosa ahí con una
guarnición de 100.000 hombres y era una molestia si se considera lo cerca que
estaba de Japón. Por cierto, los estadounidenses no se equivocaban: ese era el
plan japonés para dar comienzo a la guerra en ese entonces.
En
respuesta a esa acción, el plan de los EEUU era enviar a las fuerzas
principales de la Marina a través del Océano Pacífico hacia el archipiélago
japonés. El objetivo era encontrar, atacar y destruir a la flota enemiga en el
camino. Los ingleses tenían planes similares. Pero, en su caso, su preocupación
era Singapur, y sería la flota mediterránea británica la que llevaría a cabo el
plan.
En un
enfrentamiento naval a gran escala, los Estados Unidos tendrían una ventaja
numérica significativa. Según las limitaciones de los tratados existentes, la
Marina Japonesa era más pequeña que la estadounidense por un ratio de 3:5 en
términos de números y tonelaje.
Los
japoneses aceptarían la batalla en algún lugar de sus aguas, pero intentarían
neutralizar la ventaja estadounidense antes de eso. Otra vez, Japón intentó
hacer justamente eso, deshacerse de la flota enemiga de camino. Los
estadounidenses usaban el término "descarapelar" para describir el
mismo proceso.
Aquí se
presenta una diferencia fundamental respecto del escenario británico. El camino
desde Malta a Singapur era un viaje en sus propias costas para los británicos.
"El imperio donde el sol nunca se pone" era realmente vasto. En
cambio, era mucho más difícil para los estadounidenses.
Japón
estuvo entre los ganadores de la Primera Guerra Mundial y había recibido las
antiguas colonias alemanas del Pacífico: una cantidad de islas de varios
tamaños, desperdigadas a través de un enorme cuerpo de agua. Según el Tratado
de Versalles, estas islas debían ser desmilitarizadas, pero no había medidas de
control establecidas para verificarlo. Los estadounidenses pensaron que los
japoneses convertirían estas islas en puestos de avanzada: aeródromos, bases de
submarinos y centros para suministrar a las flotas. De nuevo, los japoneses
hicieron exactamente eso.
Entonces,
para poder llegar al continente japonés, la flota de los EEUU debía pasar a
través de las "islas del Mandato del Pacífico Sur" e inevitablemente
ser objeto de ataque de la aviación terrestre. Mientras los bombarderos en
picada y los torpederos podían ser repelidos con la ayuda de artillería, los
bombarderos de alta velocidad "horizontal" de la nueva generación
eran un blanco mucho más difícil. Ningún caza biplano podía alcanzarlos, no
importaba qué tanto lo intentara. Un escuadrón de cazas ligeros (los jockeys
mencionados anteriormente) podían interceptarlos, pero no era muy probable que
pudieran desestabilizar el asalto, ya que se esperaba que el ataque fuese
bastante considerable.
La
Marina de los Estados Unidos creía que era posible impactar a un barco de
guerra con una bomba a vuelo horizontal a una altitud alta, solo si navegaban
en línea recta. Si el barco maniobraba, sería imposible. Pero las maniobras
bruscas romperían la formación de la flota. Otras unidades enemigas, como los
submarinos y los cruceros pesados, podrían tomar ventaja de esto y
"descarapelar" a las fuerzas estadounidenses. Vale la pena mencionar
que este era, efectivamente, el plan japonés.
Así
que, ¿cuál sería la solución? La flota principal debía asegurar el
descubrimiento de una amenaza aérea a la mayor distancia posible para darle al
portaaviones tiempo suficiente para preparar la intercepción. No olvidemos que
el portaaviones debía actuar de forma independiente de los acorazados y estar
bastante alejado de ellos. Con un posicionamiento como este, se necesitaría una
velocidad muy alta para interceptar a las fuerzas enemigas. Además, era vital
reducir el tiempo de preparación antes del vuelo. Esto significaba que los
cazas debían estar apostados en la cubierta, expuestos a los elementos, de ahí
el requisito de contar con un diseño totalmente de metal. Por otro lado, la
capacidad de maniobrar no sería necesaria porque los enemigos serían
bombarderos lentos volando desde lejos y, por ello, no serían escoltados por
cazas.
Este
razonamiento originó un conjunto de especificaciones que se convirtieron en la
base de la competencia para diseñar el "caza embarcado del año 1936".
Fue la primera vez que se les pidió a los ingenieros crear un avión de alta
velocidad. Los aspirantes debían superar velocidades de 400 km/h. Dos
prototipos llegaron a la final: el XF2A de Brewster y el XF4F de Grumman.
Curiosamente, Grumman quiso proponer un biplano al principio: una variación del
F3F. Pero, luego, los organizadores exigieron un aumento en la velocidad a 440
km/h y Grumman finalmente aceptó lo inevitable: la era de los biplanos había
llegado a su fin. Se apresuraron para hacer una nueva propuesta. Sin embargo,
el proyecto resultó fallido debido a la rapidez y a su parentesco con los
biplanos. Como resultado, ganó el vehículo propuesto por Brewster. Era más
ligero, más barato y con mejor velocidad de ascenso.
Pero,
entonces, en los Estados Unidos, como en Gran Bretaña, ocurrió un cambio de
paradigma. Antes se creía que era más fácil atravesar las islas del Mandato del
Pacífico Sur de un tirón y continuar avanzando hacia el archipiélago japonés.
Pero la segunda guerra sino-japonesa estalló en 1937. Empezó con la rápida y
total derrota del ejército chino, y con la veloz captura de varias ciudades,
incluyendo el puerto más grande en Shanghái y la capital Nanjing. El éxito
japonés hizo que el ejército estadounidense los reconsiderara como adversarios
y que cambiaran su estrategia en consecuencia. Ahora creían que era imprudente
dejar las bases japonesas en la retaguardia y las Filipinas estaban muy lejos
para poder llegar a tiempo para repeler un ataque. Significaba que, en caso de
guerra, los estadounidenses deberían capturar una isla tras otra usando marines,
construir sus bases y avanzar hacia Japón un paso a la vez, en lugar de hacerlo
en un ataque rápido.
Como resultado, se le pidió a Brewster hacer "pequeños" cambios a su proyecto. Ahora, el caza debía proveer defensa antiaérea no solo a la flota, sino también a las bases de la isla, además de proveer cobertura para los bombarderos cuando atacaran las bases de la isla. Incluso era necesario proveer apoyo inmediato a los marines en el campo de batalla y, posiblemente, atacar transportes de desembarco enemigos si decidían recuperar las islas. Además, los ingenieros necesitaban tomar en cuenta la experiencia del combate aéreo en España y las batallas libradas en China por voluntarios internacionales. Debían incrementar el alcance y la duración del vuelo, mejorar el campo de visión en la cabina de pilotos desde el frente y hacia abajo (para los ataques de baja altitud), reforzar el armamento, instalar blindaje y proteger los tanques de combustible. Sería necesario montar un motor más poderoso (y pesado) para que pudiera volar. El avión se volvió 1.5 veces más pesado y perdió contra su antiguo rival durante la siguiente competencia. Los diseñadores de Grumman habían rediseñado el F4F y superaron al F2A en todos los aspectos. Al principio de la Guerra del Pacífico, los Brewster estaban siendo reemplazados por los Grumman. Los primeros de la tercera generación estadounidense en ser concebidos fueron eliminados de los portaaviones y transferidos a centros de entrenamiento y al Cuerpo de Marines. También fueron vendidos en el extranjero y los británicos fueron su mejor comprador. Fueron ellos quienes le dieron su apodo histórico: el Búfalo. Muchos otros países compraron el avión: Finlandia, Los Países Bajos e incluso Bélgica.
El Búfalo
vio su buena parte de acción en la Segunda Guerra Mundial. Por ejemplo, en
Finlandia era venerado y respetado. Aunque, inicialmente, no lo llamaron Búfalo,
sino Taivaan Helmi, lo que significa "perla de los cielos". Comparado
con el resto de la flota arcaica era un avión bastante moderno. Asimismo,
obtuvieron la variante de exportación, que era más simple y, por lo tanto, más
ligera. Sin embargo, los estadounidenses y los británicos no fueron tan
afortunados.
Al
defender Singapur, los Búfalo británicos se enfrentaron a los nuevos aviones
del ejército japonés: los cazas de ejército Tipo 1. Para evitar nombres largos,
los japoneses llamaron al avión Hayabusa: el halcón. El resultado de las
batallas fue deplorable para los británicos.
¿Por
qué? "Los problemas de pocos" es la mejor respuesta. Los británicos
implementaron todas las mejoras técnicas y la experiencia de la Batalla de
Inglaterra en el Búfalo I. Instalaron un extinguidor de incendios automático,
un sistema para llenar los tanques de combustible con gas inerte, vidrio
blindado, parte trasera blindada, estaciones de radio poderosas con baterías
pesadas y nuevas miras. Los motores, sin embargo, eran de la variante de
exportación, que eran 200 hp menos poderosos que el prototipo estadounidense.
Tuvieron que reequipar a algunos aviones con motores de los transportes DC-3
debido a ciertas dificultades con las piezas de repuesto. Como resultado, a
pesar de tener velocidades similares, los Falcon japoneses superaban
radicalmente a los Búfalo británicos pesados en términos de maniobrabilidad
horizontal y en velocidad de ascenso. Era incluso peor con la maniobrabilidad
vertical: los Búfalo británicos ni siquiera podían dar un giro.
Sin
embargo, a pesar de todas las dificultades, pilotos de cientos de cazas
británicos aseguraron haber derribado 80 aviones enemigos, aunque más que nada
fueron bombarderos y cazas de tipos obsoletos. Pero cuando los Falcon llegaron,
los japoneses rápidamente diezmaron a los Búfalo británicos. Incluso la
"degradación" de primera línea no pudo salvarlos. Las tripulaciones
le quitaron al avión todo lo que no necesitaban en batalla: blindaje, emisoras
de radio y equipo de salvamento. Incluso las ametralladoras pesadas fueron
reemplazadas por las de pequeño calibre. Como resultado, ¡el Búfalo perdió
alrededor de media tonelada! Por desgracia, no afectó el resultado. Antes de la
caída de Singapur, dos docenas de aviones volaron a la India y nunca volvieron
a ver acción.
Luego,
tuvo lugar la célebre batalla entre los F2A del Cuerpo de Marines de los
Estados Unidos y los Zero japoneses en el atolón de Midway. Vamos a citar a uno
de los pocos pilotos sobrevivientes estadounidenses, el Teniente Segundo
Charles S. Hughes. Al terminar su reporte sobre la batalla dijo: "Estoy
seguro de que si nuestros aviones hubiesen sido la mitad de buenos que los
Zero, habríamos rechazado el ataque por completo".
No hay
mejor forma de describirlo. Así que, ¿por qué pasó así? Primero, el Zero era
varios años más joven y la aviación estaba progresando de forma muy rápida en
ese entonces. Segundo, como recordaremos, el Búfalo inicialmente no fue
diseñado para oponerse a los cazas, y una multitud de mejoras solo empeoraron
su maniobrabilidad. Tal vez por eso los británicos le dieron ese sobrenombre.
Hay un dicho, "un bote navega de acuerdo a su nombre". Y, por
desgracia, los búfalos no vuelan.
Bromas
aparte, incluso el mal rendimiento del Búfalo tuvo un efecto positivo. Sin
importar la retroalimentación negativa, hubo quienes encontraron ventajas en el
pesado y lento Búfalo. Los pilotos se dieron cuenta que podían perder a los
Zero cuando se aventaban en picada y podían derribar a los enemigos desde lejos
sin enfrentarse en un duelo aéreo, usaban su velocidad de picada y sus tácticas
de grupos aéreos de combate. Estas ideas fueron generalizadas e implementadas
en los portaaviones y hechas famosas por el piloto estadounidense John Thach.
Pronto, el F4F Wildcat, similar al Búfalo en términos de maniobrabilidad, se
convertiría en un arma formidable.
Fuente:
https://worldofwarships.com