El
bombardeo del Palacio de la Independencia de Vietnam del Sur de 1962 en Saigón
fue un ataque aéreo efectuado el 27 de febrero de 1962 por dos pilotos
disidentes de la Fuerza Aérea de Vietnam del Sur llamados Nguyễn Văn Cử y Phạm
Phú Quốc. Ambos atacaron el Palacio de la Independencia, la residencia oficial
del Presidente del país, Ngô Đình Diệm, con el objetivo de acabar con él y su
familia inmediata, que además eran sus asesores políticos.
Los dos
pilotos declararon más tarde que su intento de asesinato fue una respuesta al
régimen autocrático de Diem, que se centró más en permanecer en el poder que en
enfrentarse al Vietcong. Cu y Quoc esperaban que su ataque demostrase la
vulnerabilidad de Diem y provocase un levantamiento general, que no llegó a
materializarse. Una de las bombas llegó a penetrar en una de las habitaciones
del ala oeste, donde Diem estaba leyendo, pero no llegó a detonar; ello llevó
al presidente a afirmar que tenía “protección divina”. Con la excepción de la
cuñada de Diem, Ngo Dinh Nhu, que resultó con heridas leves, el resto de la
familia Ngo salió indemne. Sin embargo, tres funcionarios de palacio murieron y
otros treinta resultaron heridos. Después, Cu logró escapar a Camboya, pero
Quoc fue detenido y encarcelado.
A raíz del ataque, la actitud de Diem se volvió hostil hacia la presencia estadounidense en Vietnam del Sur. Diem alegó que los medios de comunicación de los Estados Unidos estaban tratando de derribarlo, y restringió aún más la libertad de prensa y de asociación política. Los medios de comunicación especularon que los Estados Unidos utilizaron el incidente para justificar su despliegue de tropas en Vietnam del Sur, aunque su actitud fue más bien de prudencia. A nivel nacional, el incidente fue reportado como incremento del complot contra Diem por parte de sus oficiales.
Planificación
Un A-1 Skyraider, modelo similar al avión empleado para el ataque.
Cu era
el segundo hijo de Nguyen Van Luc, líder del Viet Nam Quoc Dan Dang (VNQDD), en
vietnamita Partido Nacionalista Vietnamita, un partido nacionalista que se
oponía al régimen de Diem. Anteriormente, Diem había encarcelado brevemente a
Luc por participar en “actividades antigubernamentales”. El VNQDD había
previsto que, además de Cu y Quoc, otro piloto de la misma escuadra, atacase
también el Palacio de la Independencia el 27 de febrero. Irónicamente,
Quoc había sido recientemente elogiado en persona por Diem por su
conducta en combate.
Cu
reclutó a Quoc convenciéndole de que tanto el
Ejército de la República de Vietnam como
los Estados Unidos eran conscientes del complot, mostrándole
un artículo crítico de Diem en
Newsweek como “prueba”. Años
después del ataque, Cu justificó el maltrato de Diem a los
partidos de la oposición como la motivación para su ataque. Creía que Diem daba
prioridad a su permanencia en el poder sobre la lucha contra el Vietcong y que,
durante seis años, a Cu se le había negado la promoción por la obsesión de Diem
con obstaculizar a sus opositores políticos. Cu criticó al gobierno
estadounidense por su apoyo a Diem, que a su juicio había abandonado el
esfuerzo en la guerra, diciendo que “los estadounidenses nos habían cerrado la
puerta a aquellos que realmente queríamos luchar contra los comunistas”.
El
ataque
Uno de los tanques que derribó las puertas del Palacio presidencial de Vietnam del Sur, símbolo de la victoria del comunismo sobre los estadounidenses, conservado como un icono junto al palacio.
Quoc y
Cu, que fueron capacitados en Francia y los Estados Unidos, respectivamente,
recibieron órdenes de volar de Saigón al delta del Mekong temprano por la
mañana, en una misión contra el Vietcong. En lugar de proceder como se les ordenó,
cambiaron el rumbo para atacar el Palacio de la Independencia, la residencia
oficial presidencial. En torno a las 07:00 horas, el palacio francés de la
época colonial quedó envuelto en llamas tras el ataque de Quoc y Cu con aviones
monoplazas estadounidenses Douglas A-1 Skyraider, llevado a cabo con bombas y
napalm, antes de barrer el complejo presidencial con cohetes y fuego de
ametralladora.
El dúo
continuó el ataque durante treinta minutos antes de que unidades leales al
presidente lanzasen un contraataque. Aprovechando el mal tiempo y un cielo
cubierto de nubes bajas, los dos pilotos volaron en círculo sobre el palacio a
una altura de unos 150 metros, ocultándose entre las nubes para volver a
atacar. El bombardeo cogió desprevenida a la guarnición de Saigón que, en la
confusión, no pudo determinar si los aviones estaban actuando solos o con
fuerzas de tierra. Tanques y vehículos blindados leales a Diem se apresuraron a
iniciar la defensa, y las baterías antiaéreas abrieron fuego, poniendo en
peligro los aviones seguidores del régimen llegados de Bien Hoa para combatir a
los dos aviones rebeldes. Dos tanques y
numerosos Jeeps armados con ametralladoras patrullaron las humeantes calles
como medida de precaución.
La
primera bomba, de 230 kg (500 libras) de peso, penetró en una habitación del
ala oeste, donde Diem se encontraba leyendo una biografía de George Washington.
La bomba no detonó, lo que permitió a Diem buscar refugio en una bodega en el
ala oriental. Allí se unió a su hermano mayor, el arzobispo Ngo Dinh Thuc, su
hermano menor Ngo Dinh Nhu, la esposa de éste -que sufrió una fractura en un
brazo mientras corría hacia la bodega- y los hijos de ambos. En otras zonas del
palacio, tres sirvientes y guardias resultaron muertos, y cerca de treinta
funcionarios más resultaron heridos. A pesar de la confusión, la mayoría de los
habitantes de la ciudad continuaron su vida habitual, indiferentes ante el
caos. El ataque duró
treinta minutos y, aunque transportaban suficientes bombas para destruir el
palacio, los pilotos no utilizaron todas sus municiones. En su huida, la
aeronave de Quoc fue alcanzada por proyectiles de un dragaminas, lo que le
obligó a saltar sobre el río Saigón, y alcanzar tierra en el suburbio de Nha
Be. Después
de su detención por una patrulla naval cercana, preguntó “¿He matado a
ese puerco?”. Cu creyó
que el ataque había sido un éxito y logró
huir hacia Camboya. Al comentar sobre
las habilidades de los atacantes, un oficial de la Fuerza Aérea
de los Estados Unidos opinó que “con
ese clima, hicieron un trabajo excelente”.
Como
consecuencia del ataque, casi toda el ala izquierda del edificio fue destruida.
Considerando que era casi imposible su reparación, Diem ordenó su demolición y
reconstrucción en el mismo lugar, no siendo reinaugurado hasta 1966.
Consecuencias
En un
breve discurso por radio después de restablecido el orden, Diem descalificó el
ataque como un “acto aislado” y atribuyó su salvación a “la protección divina”. Visitó
a los soldados heridos en los ataques, y también prometió a los
compañeros de los pilotos rebeldes que no sufrirían represalias por el
atentado. El presidente de los Estados Unidos John F. Kennedy de inmediato
envió un mensaje, denunciando el ataque como un “acto cruel y destructivo”, y
expresó su alivio de que Diem se encontrase “a salvo y sin daños”. El embajador de los EEUU
Frederick Nolting, determinó que el ataque había
sido el resultado de “dos casos aislados” y opinó
que el incidente no representaba una insatisfacción generalizada con el
régimen.
La ausencia de una reacción del Vietcong llevó a Nolting a etiquetar el
atentado como un “intento de asesinato anticomunista de alcance limitado”.
En la
Asamblea Nacional, el órgano legislativo de Diem instó
al presidente a “tomar medidas drásticas contra
elementos irresponsables”.
El General Duong Van Minh, consejero militar del Presidente, atribuyó
el asalto a “pilotos descontentos”, y señaló
que no se habían producido movimientos de tropas hostiles. La Guardia Nacional
se había mantenido leal y su comandante ordenó a sus fuerzas
aerotransportadas la toma de la Base Aérea de Tan Son Nhut.
Quoc
fue encarcelado por su acción, mientras que Cu se
mantuvo en el exilio en Camboya, donde trabajó como profesor de
idiomas. Tras el arresto y asesinato de Ngô Đình Diệm, en
noviembre de 1963, Quoc fue puesto en libertad y Cu regresó del exilio, y ambos
reanudaron su servicio en las fuerzas aéreas.
Reacción
de Diem
Ngô Đình Diệm.
Durante
la primera reunión de Nolting con Diem tras el intento de asesinato, el
presidente afirmó rotundamente que los medios de comunicación eran los
responsables del ataque. Señaló el artículo de la revista Newsweek y otros “artículos
despectivos en la prensa” para justificar su afirmación de que “los
estadounidenses estaban apoyando la revolución”. Diem declaró que, aunque algunos
periodistas interpretaron los bombardeos como una llamada de atención,
él lo vio como “una advertencia para
ellos del peligro de su irresponsabilidad fomentando el desorden”.
En una
reunión posterior con el General Paul D. Harkins, jefe de la misión militar de
los EEUU en Vietnam, Diem bromeó (refiriéndose a Nguyễn Văn Cử): “Yo no le
habría enrolado en la fuerza aérea; metí a su padre en la cárcel hace unos años”. Diem llegó a
predecir que “en algún momento voy a recibir un disparo por la espalda. Algún
día lo van a conseguir”. Así
fue, cuando fue asesinado tras el exitoso golpe de Estado de 1963. Diem respondió
a la tentativa de asesinato con la represión de disidentes
políticos y un control de la prensa aún más estricto. Un funcionario
admitió, off the record, que “ni siquiera podíamos
hablar de la libertad de prensa o pedir otras libertades [...] Diem se había
rodeado por completo de una oligarquía protectora”. Su hermano Nhu
justificó las restricciones a la oposición, señalando que “aquí siempre habrá
oposición. Si admitimos a esta gente, surgirá mayor oposición, porque son gente
polémica”. La esposa de éste
añadió “cuando abres una ventana es para que entren la luz y el
aire, no las balas. Queremos libertad, pero no ser atacados por ello”.
Reacción
de los Estados Unidos
Tras el ataque, John K. Galbraith, desaconsejó a Kennedy el despliegue de tropas de combate.
El
ataque generó la especulación de que los EEUU responderían mediante el
despliegue de tropas en Vietnam del Sur. En ese momento, el personal militar de
los EEUU oficialmente sólo llevaba a cabo tareas de asesoramiento. En su
respuesta a los medios de comunicación acerca de la estabilidad del gobierno de
Diem, el Secretario de Estado de los Estados Unidos, Dean Rusk, negó que su
gobierno tuviera planes para desplegar fuerzas de combate. Asimismo, descartó
las negociaciones con el Vietcong, del que dijo: “la raíz del problema son las
violaciones de los comunistas de los Acuerdos de Ginebra”. El embajador de los
Estados Unidos en la India, John Kenneth Galbraith, aconsejó
a Kennedy contra el despliegue de tropas de combate, por considerar que daría
lugar a un sinfín de solicitudes de más tropas por parte de
los survietnamitas. Galbraith previno que una pérdida de recursos de los EEUU
en las selvas de Vietnam sería caer en el juego de la Unión Soviética. De acuerdo con un
observador norteamericano, el bombardeo del palacio provocó
la “máxima escalada de la conspiración contra Diem”. Galbraith también
señaló que “cuando el hombre en
el poder está en caída libre, cualquier
cosa es mejor”, y consideró
que cualquier cambio en el liderazgo del Sur vietnamita aportaría
una mejora.
Fuente:
https://es.wikipedia.org