27 de marzo de 2020
ASES ALEMANES DE LA I GUERRA MUNDIAL - MANFRED VON RICHTHOFEN
Apodo:
Barón
“El
Barón Rojo”
Nació:
El 2 de mayo de 1892 en Breslau, Imperio alemán (hoy Polonia)
Murió:
El 21 de abril de 1918 a los 25 años en Vaux-sur-Somme, Francia
Grado:
Capitán de caballería
Años
de servicio: 1911-1918
Lealtad:
Imperio alemán
Unidad:
Jasta
11
Jagdgeschwader
1
Condecoraciones
Cruz
de Hierro
Pour
le Mérite
Caballero
de tercera clase de la Orden del Águila Roja
Guerra:
I Guerra Mundial
Manfred
Albrecht Freiherr von Richthofen, más conocido como el “Barón Rojo”, fue un
piloto de caza alemán durante la I Guerra Mundial. Es considerado el as de ases
de la guerra porque consiguió derribar ochenta aeroplanos enemigos.
Soldado
de caballería al inicio de la contienda, en 1915 Richthofen fue destinado al
Servicio Aéreo y se convirtió en uno de los primeros miembros del escuadrón de
caza Jagdstaffel 2 en 1916. Muy pronto se distinguió como piloto de caza y en
1917 pasó a ser líder de la Jasta 11 y después del ala de caza Jagdgeschwader
1, más conocido como El Circo Volador por los vivos colores de sus aeroplanos o
porque la unidad debía moverse de manera continua de escenario de lucha y
montaba campamentos de tiendas en aeródromos improvisados. Ya en 1918 era un
héroe de los alemanes y respetado por sus enemigos, pues permitía escapar a sus
víctimas malheridas. Su unidad fue responsable del derribo de 151 aviones
británicos, contra 66 de las propias, durante el mes de abril de 1917. Por ello recibió
la medalla Pour le Mérite.
Sus
aviones, el caza biplano Albatros D.II y luego el triplano Fokker Dr.I, le
permitían una amplia capacidad de maniobras y piruetas. Sin embargo, la mayoría
de sus victorias en combates aéreos las consiguió en un avión tipo Albatros.
Richthofen
fue derribado y muerto en la mañana del 21 de abril de 1918 cerca de
Vaux-sur-Somme, en el norte de Francia. Se ha debatido mucho sobre diversos aspectos
de su carrera, especialmente sobre las circunstancias exactas de su muerte. Su
muerte es una de las muertes más misteriosas de la I Guerra Mundial. Es uno de
los pilotos de guerra más famosos de todos los tiempos y tema de muchos libros,
películas y otros medios.
Biografía
Infancia
y juventud
Nació
el 2 de mayo de 1892 en la capital de Silesia, Breslavia (hoy Wroclaw,
perteneciente a Polonia). De niño se trasladó con su familia a Schweidnitz (hoy
Swidnica, Polonia). Era el mayor de tres hermanos. Miembro de la familia aristocrática
terrateniente Richthofen, el padre de Manfred había llegado a ocupar un alto
cargo en el regimiento de Ulanos Nº 12, una unidad perteneciente a la poderosa
caballería prusiana. Manfred y su hermano pequeño Lothar quisieron seguir los
pasos de su padre, alistándose jóvenes en el ejército imperial. Practicó caza y
equitación y cuando completó su adiestramiento como cadete, se alistó en los
Ulanos (caballería alemana), siendo nombrado tres años después Teniente del
primer regimiento.
Primera
Guerra Mundial
Tarjeta
postal alemana de 1917 con una foto de Manfred von Richthofen.
Durante
la I Guerra Mundial, von Richthofen pasó de la caballería (donde ganó la
condecoración de la Cruz de Hierro) a la infantería, pero en esta modalidad no
prosperó, ya que las condiciones que se vivían en las trincheras eran inhumanas
y "muy aburridas", según sus palabras. Finalmente encontró su lugar
alistándose en la aviación, donde demostró una gran capacidad con esta arma,
completamente innovadora para lo que hasta entonces había sido la guerra (la
producción de aviones se incrementó desde los 300, que tenían todos los
contrincantes al principio de la contienda, hasta los 150000 al finalizar).
El
biplano Albatros D.II, con el que el Barón Rojo consiguió la mayor parte de sus
victorias.
No
logró destacarse en la academia de aviadores, aunque luego demostró ser muy
capaz en combate. En el principio solo se dedicó a observar y fotografiar el
frente oriental, pero lo que él quería eran aventuras.
En
la Luftstreitkräfte, su encuentro con otro gran aviador, Oswald Boelcke, fue
decisivo para su éxito. Boelcke lo seleccionó para el escuadrón de caza
Jagdsstaffel o Jasta 2. Ya su primer combate fue una victoria. Sucedió sobre el
cielo de Cambrai, Francia, el 17 de septiembre de 1916. Durante estos primeros
meses se destacó por su agudeza visual y su innato don para afrontar el
peligro. Sus compañeros decían que su personalidad se transformaba cuando
asumía los mandos de su avión.
Durante
los 20 meses siguientes, destacaría como el mejor as de la aviación alemana
durante la I Guerra Mundial. Llegaría a superar el número de victorias de
Boelcke: 40, un récord hasta entonces. En su victoria 11 consiguió derribar el
biplano del as británico Lanoe Hawker. En enero de 1917 recibió la Cruz Pour le
Mérite.
Circo
volador Jasta 11
Réplica
del Fokker Dr.I, famoso triplano utilizado por Manfred von Richthofen.
En
1917 se le confirió el comando del Jasta 11, que luego fue conocido como el
"Circo volador" por los vivaces colores que presentaban sus 14
aviones, los cuales, al igual que un circo, se trasladaban por ferrocarril al
lugar adonde se los requería. Se ganó el apodo de Barón Rojo porque su avión
estaba pintado de rojo para que sus rivales lo reconocieran; hábil maniobra
psicológica, pues sus enemigos le temían mucho y admiraban su gran destreza
guerrera. Llegó a dirigir 58 misiones con total éxito, en las cuales derribó a
unos 80 aviones, algo que nadie llegó a superar en ningún bando durante el
resto de la guerra. En abril sumó él solo 20 derribos. Sus hombres insinuaban
que su líder tenía un comportamiento suicida. Pocos meses después recibió el
encargo de dirigir la primera ala de caza de la historia aérea, la JG 1,
integrada por los Jasta 4, 6, 10 y 11. Esta unidad llegó a derribar 644 aviones
con solo 56 bajas. Su hermano Lothar, alcanzó 40 victorias al final de la
guerra en esta unidad, Kurt Wolff, 33 victorias y Karl Allmenroder 30 derribos.
Todos lograron la Cruz Pour le Mérite.
Herido
casi mortalmente
El
6 de julio de 1917 recibió una bala perdida en el cráneo, que le provocó una
terrible herida lesionándole el cerebro; pero él continuó volando pese a estar
claramente incapacitado para soportar alturas. Se comportaba como si fuera
inmune a la muerte, no tomando precauciones e incluso violando las
fundamentales reglas de vuelo que había escrito en su manual. Llevó vendada la
cabeza durante mucho tiempo. Poco después recibió con alegría un Fokker Dr.I,
un triplano que también pintó de rojo, y que tenía gran agilidad, aunque si se
mantenía en rumbo fijo durante muchos minutos, se convertía en presa fácil.
Muerte
Restos
del avión de Richthofen.
Funerales
de Manfred von Richthofen.
Según
las fuentes oficiales, fue el Capitán canadiense Roy Brown el que consiguió
matar al piloto alemán, aunque nuevas investigaciones apuntan a que fue el
soldado de infantería australiano William John "Snowy" Evans el que
disparó desde tierra la bala calibre 7,70 mm que acabó con su vida. La bala
entró por el lado derecho del pecho y le causó heridas en los pulmones, el
hígado, el corazón, la arteria aorta y la vena cava antes de salir. Según la
opinión de los forenses, apenas contó con un minuto antes de perder la
consciencia y solo un par de ellos en morir. Poco se sabe sobre el soldado
Evans, aparte de que murió en 1925, y probablemente falleció sin imaginar que
él podía ser el causante de la muerte del piloto más famoso de la historia. Roy
Brown dejó escrito un libro sobre sus combates y detalló todo sobre el último
vuelo del Barón.
Fue
enterrado con todos los honores militares por los mismos británicos, quienes le
rindieron tributo. Su ataúd, cubierto de flores como ofrenda, fue llevado a
hombros por seis miembros del escuadrón 209. En el momento del entierro,
soldados australianos presentaron armas y lanzaron tres salvas en su honor. En
su lápida, que se encuentra en el mismo lugar donde cayó, se puede leer su
epitafio:
Aquí
yace un valiente, un noble adversario y un verdadero hombre de honor. Que
descanse en paz.
Tras
su muerte, el mando del Jasta 11 fue asumido por Wilhelm Reinhardt, el cual
murió en un accidente aéreo en julio de 1918, sucediéndole Hermann Göring,
quien era uno de los ases más destacados de la aviación de caza en esos
momentos, habiendo obtenido 22 victorias en la guerra.
El
Barón Rojo dejó un libro, escrito en 1917, durante su convalecencia por el
disparo en la cabeza. Lo tituló El avión rojo de combate, donde afirmaba que
combatía en la aviación buscando una consecuencia para su vida.
Fuente:
https://es.wikipedia.org