18 de marzo de 2020
ASES JAPONESES DE LA II GUERRA MUNDIAL - SABURŌ SAKAI
Apodo:
“El samurai del aire”
Nació:
El 25 de agosto de 1916 en Saga, Japón
Murió:
El 22 de agosto de 2000 a los 84 años en Base aérea Atsugi, Japón
Rango:
Teniente Segundo
Años
de servicio:1933-1945
Lealtad:
Imperio del Japón
Rama
militar: Armada Imperial Japonesa
Unidad:
Grupo
Aéreo Tainan
Ala
Aérea Yokosuka
Guerras/Batallas:
Guerra
Chino-Japonesa
Segunda
Guerra Mundial
Campaña
de Nueva Guinea
Campaña
de las Islas Salomón
2a.
Batalla de la Filipinas
Otras
ocupaciones:
Dueño
de imprenta
Consultor
Escritor
Sakai
en la cabina de un Mitsubishi A5M.
Saburō
Sakai fue un piloto de combate de la aviación japonesa durante la Segunda
Guerra Mundial, al cual se le adjudican 64 derribos de aviones aliados.
Breve
biografía
Saburō
Sakai nació en 1916 en Saga, Japón, perteneciente a una numerosa familia cuyo
padre les había inculcado un arraigado sentido samurái. Era el tercer hijo de
una familia de siete, de los cuales tres eran mujeres. Su padre falleció cuando
Sakai tenía once años, dejando a su madre al cuidado de siete hijos.
Aunque
la familia Sakai no podía permitirse una educación para su hijo, el tío por
parte materna (que por aquel entonces era un respetado funcionario del
gobierno) decidió adoptarlo y cubrir sus gastos en educación. Finalmente,
Saburo decidió abandonar sus estudios a causa de que se transformó en un joven
problemático. A la edad de 16 años la Armada Imperial Japonesa le dio la
posibilidad de incorporarse en mayo de 1933. Sirvió en el arma de artillería y
fue sirviente de torreta principal en el acorazado Kirishima hasta 1936.
Ese
mismo año se postuló y fue aceptado para hacer entrenamiento de piloto naval en
la academia de vuelo de Tsuchiura, graduándose como piloto de caza; sin
embargo, no fue asignado a la fuerza de portaaviones.
Comenzó
sus victorias aéreas sobre el territorio chino de Manchuria derribando un
Polikarpov I-16 a los mandos de un Mitsubishi A5M "Claude" e
intervino en la Segunda Guerra Sino-Japonesa donde resultó herido.
Después
de derribar, en combate aéreo, un bombardero soviético Ilyushin DB-3 en octubre
de 1939, sus superiores vieron en él a un guerrero nato y le fue asignado el
nuevo Mitsubishi A6M, más conocido como Zero, con el que conseguiría la mayoría
de sus victorias.
Durante
la Segunda Guerra Mundial
Al
comienzo de la Segunda Guerra Mundial, Saburō y su grupo aéreo fueron asignados
a la base aérea en la China meridional, principalmente como escoltas de
bombarderos y torpederos. Participó en el ataque a las Filipinas el 8 de
diciembre de 1941 volando uno de los Zero que atacaron la base estadounidense de Clark
Airfield. Ahí el obtuvo su primer derribo estadounidense, un P-40.
Luego obtuvo más victorias atacando bombarderos B-17, de las cuales
derribó uno.
En
1942, estando transferido a la base de Tarakan en las islas Borneo, se le
ordenó que derribara cualquier aparato enemigo estuviera o no estuviese armado.
Saburo pronto se enfrentaría a esa realidad cuando sorprendió a un avión DC-3
civil sobrevolando una isla. Sakai se acercó a investigar antes de abrir fuego
y pudo apreciar que ese avión transportaba civiles en vez de importantes
personalidades militares y, en contra de sus órdenes, decidió no derribar el
aparato. Los ocupantes lo saludaron antes de él retirarse. Su número de
matrícula fue memorizado por el piloto estadounidense.
Durante
la campaña de Borneo derribó 13 aviones de combate estadounidenses y
australianos. En esa época empezó a entrenar a pilotos aprendices en un
programa acelerado de entrenamiento. Su escuadrón incluyó otros ases, entre
ellos Hiroyoshi Nishizawa y Toshio Ota, con quienes competía en derribos y que,
además, formaban el trío denominado “Danza macabra” por los estadounidenses.
Otra
acción se desarrolló cerca de Australia cuando ocho Zero perseguían a un
solitario piloto australiano en un bimotor. Este, lejos de escapar, se dio la
vuelta y se enfrentó a una muerte segura, siendo derribado por Sakai. Luego de
finalizado el conflicto, Sakai envió un ruego al gobierno australiano para que
se reconociera el valor de dicho piloto, aunque finalmente el ruego fue
denegado.
Campaña
de Guadalcanal
El
3 de agosto de 1942, Sakai y su grupo aéreo Tainan Kokutai fue relocalizado en
Lae, Rabaul. Cuatro días más tarde, en la tarde del 7 de agosto, los Marines
desembarcaron en Guadalcanal y capturaron la pista de Herdenson Field, en
construcción por los japoneses.
Sakai
y su grupo fueron asignados como escoltas de bombarderos en Guadalcanal, lo que
suponía un trayecto de cinco horas de vuelo, casi al límite de su radio de
acción.
Durante
la aproximación Sakai pudo observar que los nuevos cazas estadounidenses
Grumman F4F Wildcat presentaban una nueva técnica de combate que consistía en
frenarse y atacar por la cola.
El
8 de agosto, Sakai sorprendió a un solitario Wildcat F4F comandado por el as
estadounidense comandante James "Pug" Southerland, que combatía
contra unos Zero en medio de las nubes. Sakai quiso participar al ver la
dificultad de sus colegas en derribarlo. Sakai empezó una persecución sobre la
isla donde el Wildcat, hábilmente maniobrado, resultó una presa muy difícil de
atacar, demostrando estar al nivel de su homólogo japonés. Además, el Wildcat
soportó un castigo enorme. Southerland maniobró el aparato cada vez que caía en
la mira japonesa y causó admiración en Sakai. El duelo se transformó en una
contienda personal.
Sakai
posando al frente de su caza Mitsubishi A5M en 1939.
En
una maniobra de frenado, Southerland consiguió colocarse en la cola de Sakai y
por breves instantes estuvo en la mira del Wildcat, pero extrañamente este no
disparó. Sakai se zafó del estadounidense replicando la maniobra y, cuando iba
a disparar, pudo constatar que su enemigo estaba gravemente herido y disparó
solo al motor del Wildcat, el cual se trabó y empezó a caer. Southerland saltó
en paracaídas y se salvó luego de muchas peripecias en tierra. Sakai dio la vuelta
y volvió al escenario.
Estando
cerca de Tulagi, Sakai tropezó con unos TBF Avenger, pertenecientes al
portaaviones USS Enterprise (CV-6), a quienes confundió con cazas, y durante la
aproximación Sakai fue ametrallado por el artillero de cola. Uno de los
disparos atravesó la carlinga del Zero de Sakai y penetró en su cabeza, sobre
el arco superciliar del ojo derecho, atravesando limpiamente el cerebro con
salida posterior. Sakai, increíblemente, no murió instantáneamente, pero perdió
la motricidad de su lado izquierdo completamente y apenas pudo guiar su avión.
Pensando
en lanzarse sobre un barco estadounidense, Sakai buscó un objetivo para
inmolarse en forma kamikaze, pero desistió de su decisión y buscó el camino de
regreso a su base. Cuatro horas y media después aterrizó en estado grave y fue
atendido por los médicos, que no lograron salvar su ojo derecho.
Tras
su recuperación, Sakai sirvió como instructor de vuelo hasta que logró volver
al servicio activo en misiones secundarias. En una de ellas fue sorprendido en
solitario por una formación de 15 F6F Hellcat. Con gran pericia logró eludirlos
esquivando sus ráfagas con mil y una maniobras y regresar a Iwo Jima, donde la
artillería antiaérea los espantó. El A6M5 de Sakai aterrizó sin daño alguno. Volvió
entonces a las labores de instrucción de nuevos pilotos hasta la rendición de
Japón.
Posguerra
Sakai,
después de terminada la guerra, viajó varias veces a los Estados Unidos y se
entrevistó con varios de sus antiguos enemigos, dio muchísimas charlas y publicó
un libro titulado Samurái en el que relata sus aventuras durante la segunda
guerra mundial.
Finalmente,
murió en el año 2000 de un infarto de miocardio.
Fuente:
https://en.wikipedia.org